IV. La Paz Bus

El proyecto La Paz Bus del Gobierno Municipal de La Paz (GMLP) consiste en la implantación de un sistema de buses de gran capacidad de transporte de pasajeros, que circularían por carriles exclusivos en la ruta troncal que va desde Cota Cota hasta La Ceja de El Alto, en una línea que iría del mercado Camacho hasta la plaza Villarroel y tres líneas que partirían de La Ceja de El Alto e irían una hasta Río Seco y otras dos hasta Nuevos Horizontes y Rosaspampa.

El proyecto costaría de 124.460.000 $US, para la construcción de la infraestructura (57.670.000 $US), la adquisición de buses (47.450.000 $US), la compra de los vehículos de los transportistas (14.100.000 $US) y el establecimiento de un sistema de cobro de pasajes (5.240.000 $US). El sistema La Paz Bus sería complementado por el Sistema de Transporte Municipal (SETRAM) que proveería buses de menor capacidad, que servirían a las zonas alejadas que no son directamente servidas por La Paz Bus.

La infraestructura sería construida en el sistema actual de calles y avenidas de las ciudades de La Paz y El Alto. La construcción estaría a cargo del GMLP y estaría compuesta por: terminales, terminales de transferencia, estaciones de embarque y desembarque, carriles exclusivos para la circulación de buses articulados y un sistema especial de semáforos.

No está claro cuál sería la estructura organizativa con la cual funcionaría La Paz Bus. El GMLP no ha especificado qué tipo de organizaciones operarían los buses. ¿Serían los actuales transportistas los operadores del sistema, a través de las organizaciones que actualmente tienen o formarían empresas o cooperativas? Para complicar más el problema, el Gobierno ha suscrito un convenio con los sindicatos de transportistas para la adquisición de buses chinos, para lo cual les otorgaría créditos por un valor de 100 millones de $US. Todo esto el Gobierno lo hace ignorando el proyecto La Paz Bus y la competencia que tienen los Gobiernos Municipales sobre el transporte público urbano.

Posiblemente el mejor camino es que los actuales proveedores formen empresas, a las cuales se les daría en concesión líneas del Sistema La Paz Bus. El capital inicial de estas empresas sería lo ya previsto por el proyecto para la adquisición de los vehículos de los actuales proveedores. Entonces estas empresas asumirían el crédito para la adquisición de los buses articulados, que sería la mitad del crédito que el Gobierno piensa otorgar a los sindicatos. Como estas empresas tendrían exclusividad para operar las líneas de transporte público, la reposición del crédito estaría asegurada para el Estado.

Tendría que haber una empresa que administre, planifique y fiscalice todo el sistema de La Paz Bus y el SETRAM. Esta empresa daría en concesión los servicios de transporte de pasajeros a las empresas operadoras. Por otro lado, administrará las terminales y los centros comerciales y estacionamientos asociados con éstas. También se encargará del sistema de cobro de pasajes.

Los sindicatos de transportistas ya han expresado su oposición al proyecto La Paz Bus, fundamentalmente porque quieren seguir manejando a su antojo el transporte público, como lo han hecho en el pasado. Con el proyecto La Paz Bus se tiene que rescatar el principio de que el transporte público es un servicio que tiene que ser provisto bajo ciertas normas de calidad y no puede proveerse según la conveniencia de los proveedores. Se trata del interés de toda la comunidad versus el interés de un gremio. Por otro lado el transporte público tiene que tener prioridad sobre el privado y comercial.

Si es que se implementa el proyecto La Paz Bus y su proyecto complementario SETRAM, aparte de proveerse un servicio de transporte de calidad, proporcionará a las dos ciudades de otros beneficios como la liberación de recursos económicos, que se producirá por la reducción de los costos de operación (que incluye el costo de combustibles). Esto por la utilización de menos unidades de transporte y disminución de la congestión.

Los recursos liberados pueden ser empleados para la producción de más bienes y servicios en las dos ciudades. En general el proyecto La Paz Bus contribuirá al crecimiento de la economía de la metrópoli y al mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes, porque ésta dispondrá de un eficiente sistema de transportes. Una industria que puede ser muy favorecida es la del turismo, que hará a la metrópoli más atractiva para los turistas. Los mayores beneficiarios del proyecto serán los pobres, los ancianos, los niños y los discapacitados.

Incluso los actuales transportistas se beneficiarán con el proyecto. Si bien se perderá empleos informales de conductores, el nuevo sistema compensará a éstos con otros formales en la empresa administradora del sistema y las empresas de buses. El proyecto contribuirá a la formación de capital a través de éstas. De esta manera los dueños actuales de vehículos conservarán sus inversiones y la empresa administradora dispondrá de recursos para desarrollar proyectos de infraestructura y de equipamiento urbano.

Por el bien de un millón y medio de habitantes y quizá más, se tiene que implementar “sin miedo” el proyecto La Paz Bus con su complementario SETRAM. Tendrá el apoyo mayoritario de paceños y alteños.

El autor es ingeniero civil y docente de la UMSA.