Asambleístas de Convergencia Nacional (CN) observaron que el Ejecutivo no tiene una trato leal con las organizaciones sociales, una vez que éstas manifiestan una postura contraria a las determinaciones del aparato estatal, como ocurrió con la Cidob, Conamaq y recientemente el sector del transporte con la polémica generada con la Ley de Extinción de Dominios de Bienes a Favor del Estado.
De acuerdo con la diputada por Unidad Nacional (UN), Elizabeth Reyes, el Gobierno pretende controlar a los dirigentes de las diferentes organizaciones, lanzándoles acusaciones cuando éstas se oponen a alguna de sus determinaciones.
“Una vez que las organizaciones se vuelven un estorbo para el Gobierno, oponiéndose a sus políticas arbitrarias, el Presidente sólo lanza acusaciones y demuestra deslealtad con quienes alguna vez lo apoyaron o hasta lo llevaron al Gobierno”, dijo.
En tanto, el diputado Galo Bonifaz (MAS), afirmó que las acusaciones de las autoridades gubernamentales y en especial del presidente Evo Morales, son en contra de los dirigentes de las organizaciones sociales.
“El Presidente sólo dijo que no es posible que los transportistas se opongan a una ley que va a luchar contra el narcotráfico. Lo mismo pasa con los demás sectores, el Gobierno no puede concebir que haya sectores que se opongan a las decisiones del Presidente, cuando él sólo busca el bien de todos”, señaló.
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