Problema de bloqueo en Sorata está parcialmente superado

Luego de más de una semana de bloqueos y problemas en Sorata, ayer se pudo despejar la ruta de ingreso a esta localidad. Los vehículos pudieron pasar, luego del encuentro que sostuvo el gobernador César Cocarico con los pobladores de Millupaya, quienes accedieron a dialogar siempre y cuando se libere al alcalde Adelio Flores, quien actualmente se encuentra detenido en la cárcel de San Pedro.

En Millupaya, distante a 33 kilómetros de Sorata se habían apostado medio millar de personas que impedía el tránsito de vehículos que tuvieron que buscar rutas alternativas.

Los pobladores de Sorata se quejaron porque los comunarios los dejaron sin energía eléctrica y empezaban a escasear los alimentos y productos de primera necesidad, así como los insumos para el centro médico, aspecto que iba contra los derechos fundamentales de las personas.

“No soy superior del juez y del fiscal para darles una orden, sí me comprometo a buscar el diálogo y llegar a un acuerdo. Me quedaré en esta población hasta que se encuentren los acuerdos”, dijo el Gobernador en el diálogo que sostuvo con los pobladores de las regiones aledañas y luego con los pobladores de Sorata.

La muerte de seis personas en un accidente de tránsito en inmediaciones de Sorata fue otro de los elementos disuasivos, porque se argumentó que los bloqueos obligaban a los transportistas a buscar rutas alternativas.

“Debemos buscar un punto neutral para el diálogo, puede ser también en La Paz, lo importante es que haya predisposición para hablar”, dijo Cocarico, esperando un acuerdo para dialogar. Ambas partes aceptaron la propuesta.

En tanto, Faustino Aruquipa, que había recibido una golpiza de los comunarios desistió de iniciar un proceso a sus agresores. “Lo hago con el único ánimo de encontrar un acuerdo”, dijo el damnificado.

Hasta ayer por la tarde, los accesos a Sorata estaban interrumpidos, ni la fiesta de Todos Santos, ni los pedidos de los vecinos lograron persuadir a los comunarios de levantar su medida, de manera que decenas de personas que querían llegar hasta esta localidad distante a 137 kilómetros de La Paz.