Perú y Bolivia firman plan para luchar contra el tráfico de bienes culturales

Lima, (EFE).- Los Gobiernos de Perú y Bolivia suscribieron ayer un plan de acción para luchar contra el tráfico ilícito de bienes culturales, que también permitirá a ambos países elaborar un programa conjunto de cooperación académica, arqueológica y de protección del patrimonio.

El acuerdo fue firmado en la sede del ministerio peruano de Relaciones Exteriores por los ministros de Cultura de Perú, Luis Peirano, y de Bolivia, Pablo Groux, en presencia del canciller peruano, Rafael Roncagliolo.

El canciller declaró que el acuerdo será "de vital importancia" para formular una estrategia común frente a ese delito y permitirá perfeccionar métodos y procedimientos para frenar el comercio ilegal de bienes culturales.

Roncagliolo enfatizó que el tráfico de drogas, el comercio ilegal de armas y el tráfico de bienes culturales son delitos a gran escala que afectan a diversos países en el mundo y los Estados deben combatirlos.

Durante el encuentro Groux entregó a las autoridades peruanas una momia prehispánica que fue incautada por las autoridades de Bolivia.

"Este acto de entrega de esta momia es un ejemplo. Ojalá que en otros países del mundo, donde existen bienes culturales de Perú y Bolivia que han sido saqueados, podamos recuperar sin necesidad de procesos complejos y costosos", comentó el canciller.

Groux manifestó, por su parte, que llegó hasta Lima para cumplir "una obligación de honrar la cultura de los Andes" al entregar la momia decomisada en 2010, en la ciudad boliviana de El Alto.

Peirano señaló, a su turno, que la entrega tiene "un enorme significado" porque es producto del trabajo coordinado entre las autoridades de ambos países e incluso de empresas privadas que intervinieron para su recuperación y traslado.

"Es un acto sumamente simbólico porque comprueba nuestra profunda raíz histórica", acotó.

El informe de una comisión binacional que hizo un peritaje a la momia señaló que corresponde al fardo de un infante en posición flexionada con la cabeza expuesta y momificada, mientras que el resto del cuerpo está envuelto en tres textiles.