La fuerza del orgullo

En el fútbol bien se dice que el que perdona muere, eso le sucedió al plantel de Petrolero equipo que vencía a Wilstermann y terminó sucumbiendo 2-1, en el encuentro correspondiente a la decimoquinta fecha del Campeonato Apertura.

La planilla de Yacuiba presentó un equipo bien trabajado, los jugadores Freddy Chispas y Martín Palavicini hicieron lo suyo para complicarle la vida a Marcelo Robledo, guardameta aviador, quien tuvo que esforzarse principalmente en el primer tiempo.

Petrolero afrontó gran parte del compromiso con un hombre menos debido a la expulsión de Miguel Ortiz quien salió del campo de juego a los 43 minutos, la ausencia del futbolista incidió bastante en la segunda etapa porque el equipo cochabambino ingresó con todo su potencial para desequilibrar el marcador.

A los 35’ del encuentro el delantero del equipo visitante, Martín Palavicini, aprovechó un pase directo para convertir el tanto de Petrolero, el jugador hasta ese minuto había marcado la diferencia y era el más desequilibrante.

El gol dejó en evidencia que el Benjamín liguero iba a cambiar la historia del equipo, pero después cayó presa de sus errores en una noche diferente, pues también estrenaban técnico (Sergio Apaza) quien fue habilitado ante la Liga para que dirija el cotejo.

En la segunda etapa los dueños de casa comenzaron mejor, tuvieron una charla técnica que sirvió de mucho ya que el cambio era evidente, ingresaron con la idea de sumar los tres puntos.

Pablo Salinas, en el minuto 65, rompió el hielo en el estadio cochabambino, el jugador del equipo dueño de casa aprovechó un centro de Erick Aparicio para enviar la pelota al fondo del arco, el tanto del empate le dio mayor movimiento a Wilstermann.

A los 73 minutos Augusto Andaveris, de cabeza, convirtió el segundo y definitivo gol del encuentro, el jugador de los rojos recibió un centro perfecto de Maximiliano Andrada quien jugó uno de sus mejores compromisos.