Analistas sostienen que PGE de 2013 ignora inversión extranjera

El Presupuesto General del Estado (PGE) presentado por el Gobierno para la gestión 2013 fue calificado como moderado por los analistas económicos Luis Fernando Baudoin y Gonzalo Chávez, quienes consideran que el incremento de 172 millones de bolivianos representa un 18% del crecimiento económico del país con relación a la presente gestión, lo que significa que 77.1% de recursos son propios y 22.9% son las inversiones extranjeras.

“Las bases del presupuesto, si bien son los ingresos y las recaudaciones, los que se mantienen con hidrocarburos, el mismo registró un incremento favorable el 2006, que era de 4 mil 489 millones de dólares y en esta gestión es de 16 mil millones de dólares, lo que significa que se ha incrementado en cuatro veces” dijo Baudoin.

Explicó que existen otros ingresos por recaudación tributaria que el 2006 era de 21 mil millones de dólares; mientras que este año es 37 mil 600 millones de dólares, que representa recaudación de la economía formal que lo pagan los bolivianos y representa el 50% del PGE.

Baudoin sostiene que la composición presupuestaria para el 2013 es de 77.1% de recursos propios y 22.9% son las inversiones extranjeras. Esta estructura ha sido invertida en comparación al 2005, donde el 67% era inversión extranjera, mientras que el 37% de los recursos eran propios.

“Por lo tanto, sostuvo, el mayor problema para el Gobierno es el rezago de la inversión, la misma que explica los modelos moderados de crecimiento. Si bien el Gobierno tuvo un par de años, en el que la inflación le pasó dos dígitos, el crecimiento de la economía del país quedó en rezago. El segundo tema es que hay una inflación en los bienes y salarios muy importantes, la gente destina un porcentaje alto de sus ingresos al consumo de alimentos”.

Por su parte, el analista Gonzalo Chávez sostiene que el próximo PGE del 2013 representa un incremento moderado de la economía nacional, en comparación con el crecimiento de países vecinos y los anteriores resultados de bonanzas económicas del país registrados en los años de 1970 y 1990.

Considera que en la actualidad hay un sobredimensionamiento en la inversión pública, ya que para la presente gestión se ofreció 3.400 millones de dólares, pero difícilmente llegaremos a los 2.700 millones de dólares, cuya ejecución de dicho presupuesto se convierte en una de las mayores problemáticas del actual Gobierno.

Para Chávez el promedio de los últimos siete años, debiera ser comparado no sólo con los últimos 20 años de neoliberalismo, sino sobre todo los niveles de bonanza parecidos en el país de los años 70 y mediados de los 90, del siglo pasado. La tasa de crecimiento no es tan interesante, porque en el período de 1993 fue la misma que la actual del 4.7%. Mientras que la tasa de crecimiento de los años 1970 fue de 5.5%, donde incluso se registró la mayor tasa de crecimiento con el 7%”.

La segunda comparación, efectuada por Chávez, se refiere al crecimiento económico con los países vecinos, como en el Perú que refleja porcentajes del 7 y 7, 5%, mientras que en el Brasil antes de la crisis su crecimiento era favorable, “por lo tanto, deberíamos crecer del 6 a 6.5% de manera sostenible y por varios años, con la finalidad de poder salir de los grados de pobreza”, acotó.

Ambos analistas coincidieron que el mayor problema del país es la tasa de inversión, la misma que define si existe o no crecimiento en la economía del territorio nacional. “siendo similar la tasa de inversión de los años 90 a la actual, e incluso está por debajo a la inversión efectuada en los años 70”, señaló.

En la actualidad la tasa de inversión en Bolivia, de acuerdo con el Producto Interno Bruto (PIB), está en 17%, al igual que fue en los períodos neoliberales, pero en los años de 1970 era del 21 a 22 %, por lo que sólo se ha efectuado el cambio de la composición de la inversión, donde la pública es superior en comparación a la privada.

“Mientras que en otros países como el Perú y Chile, la tasa de inversión extranjera en mayor en el sector minero, con montos de 6 mil millones de dólares y 7 mil millones de dólares o el caso de Brasil, donde por año ingresan alrededor de 30 mil millones de dólares, mientras que en Bolivia el 2012 al 2013 se prevé lo mismo de 500 a 800 millones de dólares, que son parámetros muy bajos.