Punto aparte
En el continente latinoamericano mejoró de forma importante la situación de la pobreza, en los últimos 20 años. Pero falta mucho para resolver la desigualdad persistente, en distintos grados, en cada uno de los países de la región.
Según estudios de SOPLA, organismo especializado de la Fundación Konrad Adenauer S. (KAS), realizados en trece países, entre ellos Bolivia, por la tasa de pobreza e indigencia en 12 de ellos fueron clasificados en tres grupos.
Argentina, Chile y Uruguay son los países con menores niveles de pobreza, inferiores al 12%; Costa Rica, Perú y Brasil tienen tasas de pobreza entre 17% y 22%; en el resto de los países del área, entre los que está Bolivia, presentan rangos de pobreza superiores al 30%.
Los estudios establecen, empero, que no necesariamente las economías con menores tasas de pobreza son los que tienen mejor distribución del ingreso. Así, Uruguay es el país con mejores indicadores de equidad y con mejor distribución del ingreso.
Chile y Argentina, por el contrario, en sus estadísticas muestran tasas de pobreza muy bajas, pero son parte del grupo de países donde el coeficiente de Gini (medición) es apenas superior a 0.5. El resto de países, con excepción de Costa Rica y Guatemala, ofrece una reducción positiva, aunque pequeña, en el mismo coeficiente, en los últimos 10 años.
En varios casos -Bolivia inclusive- las políticas de apoyo a la población de menores recursos, como los bonos u otras formas asistenciales, permitieron buenos resultados, aunque en la perspectiva no son los medios más idóneos.
Perú y Ecuador redujeron la brecha en 43% y 32%, respectivamente. Disminuciones menores pero aún altas, 20%-30%, se registraron en Brasil, Bolivia, Uruguay y Chile.
El combate a la pobreza y el dar oportunidades de movilidad social tienen que expresarse en el acceso a la educación y la salud. El crecimiento económico y la generación de empleo son condiciones necesarias, aunque no enteramente suficientes para lograr cambios significativos en la distribución del ingreso y la mayor permeabilidad entre los estratos sociales.
Al margen, las estrategias que al respecto pueden aplicarse no son efectivas si hay ausencia de un sistema político que las integre y les dé coherencia. Además, es indispensable contar con un sistema político que garantice la protección de los derechos civiles, que facilite una alta participación ciudadana, en el que existan partidos políticos representativos y organizados, con capacidad de aplicar y dar continuidad a las agendas gubernamentales.
El libro “Pobreza, Desigualdad de Oportunidades y Políticas Públicas en América Latina” extrae tales conclusiones, pero advierte que las referidas mejoras en la lucha contra la pobreza no son todavía suficientes. Falta hacer mucho más; entre otros requisitos, instituir programas oficiales específicos para darle organicidad y sistematizar el combate a la pobreza.
La obra fue presentada en La Paz el 8 de noviembre, en el hotel Radisson, en acto organizado por la Fundación KAS y la Fundación Milenio. Para tal efecto, llegó el Director del Programa Regional-Políticas Sociales en América Latina (SOPLA), Olaf Jacob, con sede en Brasil.
Las palabras de presentación estuvieron a cargo de Jacob y de la representante de KAS en Bolivia, Sussane Käss. Enseguida, expusieron el resultado de sus estudios los investigadores de Perú, Ecuador, Venezuela y Bolivia.
Jacob, en el Prefacio del Libro, anota: “A pesar de que en los últimos años se han logrado avances significativos en muchos países de la región para reducir la brecha entre ricos y pobres, América Latina sigue siendo el continente más desigual a nivel global. Estamos convencidos que la desigualdad de oportunidades representa uno de los mayores desafíos a ser abordados por Latinoamérica en las próximas décadas”.
El estudio sobre Bolivia lo realizó el presidente de la Fundación Milenio, Roberto Laserna, economista doctorado en la Universidad de California (Berkeley). Efectuó consultorías para el Banco Mundial, BID, PNUD y otras entidades internacionales. En columna aparte expondremos los resultados de su investigación sobre la pobreza en el país.
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