La Obertura 1880 de Pior Ilich Tchaikovsk es una composición que conmemora la victoria de Rusia frente al intento de Napoleón de conquistarla. Su importancia reside en el reconocimiento al coraje y a la templanza de un pueblo frete a la invasión. La ejecución de esta obra maestra de la música clásica podrá vivirse -con un espectáculo pirotécnico y efectos especiales incluidos- el miércoles 28 y jueves 29, en el Centro Sinfónico desde las 19:30.
Como podrá apuntar un conocedor, la Obertura es una narración completa que inicia recordando la apacibilidad de las praderas y convirtiéndose después en dramática, luego enérgica, terminando en unos -casi- histriónicos fuegos artificiales. Estos cambios requieren de una gran maestría, que en esta ocasión recaerá en la dirección del maestro Ramiro Soriano, además de la participación de la renombrada pianista boliviana Marianela Aparicio.
Soriano señala que la novedad del momento culminante es el uso de un cañón, que figura en las anotaciones de Piotr Tchaikovsky en la partitura. En el concierto en el Centro Sinfónico Nacional, las explosiones serán emuladas por efectos pirotécnicos y el sonido de las explosiones se vivirán gracias a efectos especiales.