Se manipula la justicia y se intimida a determinadas personas. Ésa es la aseveración de diversos integrantes de los partidos de oposición al Gobierno que ven con susceptibilidad los últimos hechos de corrupción.
Tomaron como ejemplo el caso de Ignacio Villa Vargas, alias “El Viejo”, quien admitió que recibía un salario del Ministerio de Gobierno para implicar a las cabezas de la media luna en actos irregulares.
Para el diputado por Convergencia Nacional (CN), Roy Moroni, éste es apenas el inicio del descubrimiento de más implicados, lo que confirmaría el abuso de poder de varios funcionarios estatales.
“Estos abogados se dejaron llevar por los beneficios que traen estos delitos, hacen quedar mal al gobierno de Evo Morales y a todos los bolivianos, como si fuésemos un país de extorsionadores. Creo que el Presidente debe empezar a limpiar la casa por dentro, estos delitos están en los pasillos del Palacio”, dijo.
El diputado por Unidad Nacional (UN), Jaime Navarro, coincide con Moroni respecto a que los asesores involucrados en estos delitos extendieron sus influencias en casos comunes y políticos, permitiéndose a sí mismos ser presa de la ambición de poder y la corrupción.