Fiscal denuncia que timonel de lancha accidentada conducía en estado de ebriedad

Alberto Quispe Gutiérrez, timonel de la lancha que se accidentó en la isla Zuriqui del Lago Titicaca, habría conducido el transporte en estado de ebriedad, según denunció el fiscal del caso Antonio Vargas.

Por su parte, Hernán Carlos Tambo, abogado de la defensa, desmintió esta versión, entretanto, el acusado permanece detenido en celdas de la Fuerza especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de El Alto.

Por el hecho, ahora el fiscal aseguró que el detenido está implicado en el delito de homicidio.

“El Ministerio Público pudo encontrar suficientes elementos de convicción para imputar al aprehendido, por el delito de homicidio porque el mismo, se encontraba en estado de ebriedad en el momento que conducía la lancha”, aseveró Antonio Vargas, fiscal destinado al caso.

Por ello, el conductor de la lancha se encuentra en calidad de aprehendido en las dependencias de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc).

Asimismo, informó que se realizará una investigación para determinar si los maestros que se encontraban en el momento del accidente estarían en estado de ebriedad.

“Lo lamentable es que aún se encuentran personas desaparecidas”, agregó el Fiscal.

Por su parte, el imputado, Alberto Quispe Gutiérrez de 47 años de edad, evitó dar declaraciones a los medios de comunicación, sin embargo, Hernán Carlo Tambo, abogado de la defensa, negó que su representado estuviera con efectos etílicos en el momento de la tragedia.

“De ninguna manera estaba en estado de ebriedad, las causas del accidente son netamente climáticas”, manifestó Carlo.

Agregado a ello, el abogado aseguró que la lancha tiene una capacidad para trasladar de 20 a 23 personas por ello, negó que hubiera sobrepeso.

El siniestro ocurrió el pasado martes por la noche, se trata de una lancha que salió de Suriqui rumbo a Huatajata con 26 personas a bordo, misma que se hundió en las cercanías de la isla por el clima adverso y el oleaje de aquel momento. Los que sabían nadar (cinco) llegaron hasta la isla, otros cuatro se aferraron al resto de la lancha y fueron rescatados por una embarcación que llegó media hora más tarde hasta el lugar.

El exceso de peso fue una de las causas del hundimiento. “El agua entró por la popa, era una embarcación pequeña, una embarcación civil, que iba a Huatajata. Habían concluido con la celebración de los bachilleres y luego vino el accidente”, narró el capitán Paulo Cardona, participante en el rescate.

Como resultado, murieron 11 personas y, hasta el cierre de esta edición, oficiales del Centro de Buceo en Altura (CIBA), conjuntamente con oficiales de la capitanía de puerto de Tiquina continuaban buscando los cinco personas que estarían en calidad de desaparecidos.