Los trámites en las oficinas de Derechos Reales se han convertido en un calvario para cientos de propietarios de inmuebles y terrenos, en muchos casos los mismos duran hasta décadas tal como nos contó un ciudadano de la tercera edad.
Varias personas aprovecharon la presencia de EL DIARIO en las dependencias de DDRR para hacer conocer sus reclamos de maltrato y falta de consideración. Además, manifestaron que el sistema es arcaico y por la burocracia esta entidad es definida como “la más difícil” para realizar procesos de inscripción de inmuebles.
Por su parte, la registradora de Derechos Reales, Isabel Galleguillos Arce, admitió que hay cierta demora en los trámites debido a que, en los últimos días, la institución trabajó con un déficit de personal. “Hubo cambio de personal que nos ha llevado a una crisis esperamos que ésta sea temporal”, explicó.