Los últimos instantes de la vida del gigante

Bolívar muere en soledad en San Pedro Alejandrino, a la edad de 47 años 6 meses y 23 días, en Santa Marta en la casa de su amigo español Joaquín Mier, Reverende, el último médico del Libertador, quien lo atendió en los instantes finales de su vida, refiere que al amortajar al héroe notó que su camisa estaba maltratada y con roturas, el dueño de San Pedro Alejandro sacó unas camisas nuevas de su propiedad para amortajarlo.

17 de diciembre 1830.

RELATO DEL DR. PRÓSPERO REVERENDE

SIMÓN, EL LIBERTADOR

Su excelencia llegó a Santa Marta a las siete y media de la noche del día 1 de diciembre procedente de Sabanilla en el bergantín Manuel. El día seis, habiendo manifestado su excelencia el deseo que tenía de ir al campo, salió su excelencia por la tarde en berlina para la quinta San Pedro.

Llegó por fin el 17 de diciembre, eran las 9 de la mañana cuando me preguntó el General Montilla por el estado del Liberta-dor, le contesté que a mi parecer no podría terminar el día. Las lágrimas se asomaron a los ojos.

Me senté a la cabecera teniendo en mi mano la del Libertador que ya no hablaba sino de un modo confuso. Sus facciones expresaban una completa serenidad, ningún dolor o señal de padecimien-to. Su fin llegaba sobre su noble rostro. A los pocos minutos exhalaba su último suspiro.

CARLOS BORGES RELATA:

Estamos en San Pedro Alejandrino, es el 17 de diciembre. Qué silencio en aquella alcoba, qué frío aquel sudario. Qué soledad de aquel muerto, desde las playas del Caribe hasta los riscos patagónicos, sollozaban en duelo una fila de naciones huérfanas.

Manuelita dice de Bolívar: “amé al Libertador, muerto lo venero”.

Fragmentos del libro Simón Bolívar EL LIBERTADOR, del Dr. Carlos Saravia Goitia.

“La impunidad de los delitos hace que éstos se cometan con más frecuencia, al fin llega el caso en que el castigo no basta para repri-mirlos”. BOLÍVAR.