Inteligencia Emocional
“La satisfacción que se siente cuando se descubre una fuente de negatividad y el conocimiento para anularla es enorme” - Eduardo Kucharsky Asport
La mayor parte de las personas en este mundo hemos pasado por experiencias en las cuales alguna persona se metió en nuestra cabeza y por alguna razón no podemos sacarla por largo tiempo.
Muchas relaciones amistosas y de otro tipo que concluyen, dejan recuerdos que de alguna forma se convierten en fuentes de negatividad, aparte de esta otra desagradable cualidad: Esos recuerdos desagradables de personas o de actos se convierten en fuentes de negatividad que cada que las recordamos nos llenamos de más negatividad, pesimismo, desaliento y debilidad corporal y esto es por el cumplimiento de un principio que dice que todo pensamiento negativo debilita, desanima, desalienta e inmoviliza o bloquea la energía vital produciendo la tendencia hacia cualquier enfermedad.
Una fuente de negatividad no sólo actúa cuando la recordamos, actúa también en los niveles subconscientes y esto es más grave aún pues hace que nuestro carácter se vuelva negativo y taciturno, débil y explosivo y esto es porque hay una o más fuentes de negatividad actuando en las profundidades de nuestra mente sin que nos demos cuenta de ello.
Como siempre, vamos directamente a la solución; el primer paso consiste en preguntarse sinceramente cuántas imágenes de personas o de actos son fuente de negatividad en nuestra mente; una vez realizada la pregunta se debe proceder a redactar una lista de todas las imágenes que nos hacen sentir mal, nos llenan de resentimiento o que simplemente nos quitan nuestra alegría y nuestra felicidad.
Una vez que tenemos esa lista de nuestras fuentes de negatividad, debemos descubrir la creencia negativa original que la creó y esto se hace utilizando la intuición, es decir adivinando más o menos cómo sería el modelo mental que hubiera creado esa situación: se debe escribir la probable creencia negativa para poder “subirla” a la conciencia a través de la repetición con el cuerpo recostado para que vaya botando o expulsando todas sus sensaciones y emociones dolorosas asociadas.
Después de este proceso de eliminación de las emociones asociadas ya puede reconectar su imagen fuente de negatividad con la evocación de un pensamiento constructivo o positivo más o menos así: En cada ocasión en que aparezca la imagen negativa que le hace sentir mal usted debe pensar el siguiente pensamiento: “Cada que veo esta imagen o la recuerdo me lleno de fuerza interior, de alegría y de ganas de triunfar y seguir adelante más y mejor que nunca”.
Si usted aprende a identificar todas sus fuentes de negatividad, podrá también identificar a sus fuentes de positividad y este tema vamos a tratarlo en futuros artículos y mientras tanto, haga su ejercicio para reconocer sus fuentes de negatividad y descubra lo agradable que es reconocer y desmantelar estos focos de negatividad y de todas las condiciones tan desagradables que ya expuse anteriormente, nos vemos en el artículo de mañana.
Afirmación constructiva para escribir diez veces durante treinta días: “Mi vida mejora incesantemente cuando transformo los focos de negatividad en fuentes de positividad”
Nota importante: Se puede aprender el método de la auto-regresión para disminuir los dolores corporales y del alma en unas cuantas sesiones de aprendizaje personal.
Si desea hacer algún comentario o alguna pregunta llámeme a los teléfonos del pie de página (2488284-72513317-78894080).
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