Ministro Romero admite que faltó concertación en temas neurálgicos

Tres temas que ajetrearon al Gobierno en 2012 y que se mantuvieron en agenda durante semanas, demostraron que escuchar las voces contrarias favorece a la hora de mejorar los proyectos. “Faltan concertaciones profundas y habíamos obviado este factor por correr”, dijo el ministro de Gobierno Carlos Romero.

Los temas que preocuparon al Gobierno en el año fueron los de salud, la ley de Extinción de Dominio de Bienes a Favor del Estado y al final de la gestión el de la red de corrupción, que afectaron la imagen del Gobierno, aunque éste se empeñó en señalar que fue un delito privado.

“No hay que entender la vida desde la perspectiva del negro y blanco, porque no todos los que están en el Gobierno son buenos y los que están fuera de él son malos”, expresó el ex Defensor del Pueblo, Waldo Albarracín.

Esta expresión surgió, luego que el Gobierno calificó en un primer momento de infiltrados a los abogados que ahora están en Palmasola, tras haber trabajado durante varias gestiones en el Ministerio de Gobierno.

“En el tema de salud hay que profundizar el problema en la Cumbre y mejorar en los preacuerdos”, destacó Romero, al referirse a un problema que dejó durante dos meses que perjudicó a enfermos y personas que no lograron recibir atención médica.

La Ley de Extinción de Dominio de Bienes provocó sobresalto en el sector de los choferes y gremiales, provocando movimientos en varias ciudades, hecho que obligó al Gobierno a frenar su consideración en el Legislativo y enviar el proyecto al Poder Judicial.

Fue el Ministro de Gobierno quien promovió esta ley desde su ministerio tuvo un distanciamiento con la Presidenta de la Cámara de Diputados en este tema y ahora señala que hubo un apresuramiento que terminó colocando en un conflicto al Ejecutivo.

La autoridad destacó que desde su repartición se propuso un diálogo con los habitantes de tierras bajas. “Estos problemas no deben ser leídos desde una visión aimara, no se puede reducir a una visión cultural. Hemos logrado acercamientos con ellos para atender sus servicios y demandas. Se necesita una ley marco de consulta”, opinó Romero, quien en un tiempo estuvo ligado a Organizaciones no Gubernamentales de ese ámbito, fue asesor de estos grupos y ahora recibe crítica de esos mismos sectores porque consideran que dio un giro copernicano en su ideología y ahora se convirtió en contrario a los intereses de esa región.

En el recuento anual de las tareas que le cupo desempeñar dejó establecido que hubo muchos problemas de difícil manejo, tal el caso de Colquiri, el motín policial y el de salud que han obligado a postular reformas estructurales.

Los asaltos, robos y crecimiento de la delincuencia en los centros urbanos, han puesto en apuro a la Policía y se ha visto como un gran desafío mejorar la seguridad ciudadana. Romero prometió que desde mediados de enero se pondrán en práctica las cámaras de vigilancia en las principales ciudades y la vigilancia aérea.

“Hay mejor control en los 15 puntos fronterizos del país, se está avanzando en el régimen penitenciario y donde más se ha invertido es en Palmasola, pero también se tiene nuevas cárceles en Montero y Yacuiba”, expresó.

No puso sustraerse al tema del momento que nació justamente en el seno del Ministerio de Gobierno. “La red de extorsión, es un tema que los hemos denunciado y se ha politizado. Hay que trabajar en la estructura de justicia”, fue su primera reflexión.

Una Comisión de Fiscales formada desde la Fiscalía General del Estado tomó a su cargo este tema y prepara desde la próxima semana una segunda convocatoria para profundizar en muchos temas que dejan dudas.

“Cuando un funcionario adquiere experiencia en un rubro profundiza sus conocimientos, maneja mejor los procedimientos y, lógicamente, esa experiencia los puede utilizar a favor de la entidad donde trabaja o en beneficio propio. Este grupo adquirió experiencia para aprovecharse en beneficio propio, este es una cuestión que va más allá de otorgarles un poder”, expresó Romero.

Del grupo que ahora está recluido en el centro penitenciario de Santa Cruz, dijo que no tenía mayores referencias salvo un caso de impasse en la línea aérea BoA, pero sin documentación de respaldo.

Un hecho concreto permitió develar el tema que tiene ajetreados a los miembros que ven el caso y es que el 26 de noviembre, una vez que se detuvo a Antezana por la venta del arroz de propiedad de Ostreicher, empezaron a salir a luz el tema de la red de corrupción.

La queja de los disputados de la oposición sobre el tema es que si no se habría producido ese hecho casual, seguramente la red de extorsión estaría en pleno apogeo con más víctimas, inocentes en las cárceles y festín de los que incurrieron en estos actos de corrupción.

Cuando se le preguntó sobre el tema del conocimiento de este hecho y que en septiembre ya se había presentado el caso ante la ministra Nardi Suxo, señaló que no iba a ingresar en la polémica y no podía opinar sobre una cuestión que pertenece a otro ministerio.

Rivera trabajó para el Ministerio de Gobierno hasta cuando se descubrió el hecho de corrupción y tuvo que someterse a los requerimientos judiciales para responder sobre los presuntos casos de corrupción. Romero en algún momento había señalado de éste funcionario que “tenía buena formación”.

“No echo de una fuente laboral por temas personales sino por una evaluación objetiva y eso se hace al final de una gestión, esa misma conducta la asumí en los cuatro ministerios en los que trabajé. Hay personas que llegan a una fuente de trabajo y echan a todos, no soy de esos”, dijo Romero.