Fundación de Puerto Alonso en el Acre

El gobierno del doctor Severo Fernández Alonso con el deseo de tomar posesión real y establecer la soberanía nacional en los territorios del norte, fronterizos con la república del Brasil expidió el Decreto Supremo de 24 de mayo de 1897 por el que nombró delegado nacional en los territorios del Madre de Dios, Acre y Purús al doctor Juan Francisco Velarde.

No habiendo resultado favorable este nombramiento, pues el señor Velarde no pudo pasar de Manaos, el Gobierno boliviano confió el mismo puesto al doctor José Paravicini, que ejercía el cargo de ministro de Bolivia en Río de Janeiro.

La principal misión del doctor Palavicini era tomar posesión de esos territorios, y fundar un puerto y una aduana sobre la margen izquierda del río Acre, a tres millas más o menos, al sur de la línea que separaba a Bolivia del Brasil.

El Gobierno confiaba en el patriotismo e inspiración del nuevo delegado para la ejecución de una empresa de tamaña magnitud. El doctor Paravicini cumplió su deber con verdadera abnegación y patriotismo, pues gustoso se prestó a “cambiar los goces tranquilos de Petrópolis y la dignificante tarea de firmar y discutir protocolos, por las fiebres palúdicas del Acre y el ingrato empeño de convencer y someter a sórdidos negociantes y huraños pobladores de aquellas selvas lejanas.

Después de comunicar al Gobierno del Brasil el designio que tenía Bolivia de establecer sus aduanas en los ríos Acre, Jaques y Alto Purús, el doctor Paravicini se trasladó de Río de Janeiro al Pará.

Después de vencer todo género de dificultades, salió del Pará con dirección al Acre, el 13 de diciembre de 1898, en un vapor brasileño fletado.

El personal que formaba la expedición era reducido y se componía de los siguientes: Manuel Vea Murguía, secretario de la delegación; Ladislao Ibarra, administrador de la aduana; Romualdo de la Vega, vista de la aduana; Moisés de Ugarte, liquidador; Manuel Aguirre, Ayudante; Jorge Vea Murguía, auxiliar de la secretaría.

Fueron además contratados los alemanes Luis Dressel y Carlos Kall, como contadores; Luis Zissel como guarda almacenes y los españoles Guillermo Utoff y Antonio Gálvez en calidad de ingenieros.

Los señores Moisés Santibáñez, cónsul de Bolivia en el Pará y Carlos Urdidinea en Manaos, por invitación del doctor Paravicini formaron parte activa y decisiva de la expedición. El señor Santibáñez se incorporó llevando en su compañía a su esposa, la señora María Herrera de Santibáñez y a todos sus niños, todos los que dieron más tarde pruebas de admirable abnegación.

El 13 de enero de 1899, el doctor Paravicini tomó posesión oficial del Acre y expidió un decreto por el que creó un puerto, al que le dio la denominación de Puerto Alonso, en homenaje al presidente Severo Fernández Alonso; fundó tanbien una aduana, un juzgado de partido, uno de instrucción, una alcaldía parroquial, el registro de derechos reales y la policía de seguridad. Además se acordó para después, que se construiría una ciudad fuera del puerto, y los edificios necesarios para oficinas, escuelas, iglesias, cárcel, etc.

Quedo así establecida la soberanía nacional en aquellas apartadas regiones.

“La acción policial y ciertos procedimientos judiciales puestos en práctica con firmeza y oportunidad, demostrarán a los trabajadores e industriales pacíficos del Acre, que las nuevas autoridades bolivianas han llevado por primera vez a esas selvas lejanas los beneficios de la vida civil”.

Fuente: El DIARIO, 3 de enero de 1923.

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