No a la matanza de animales

“Utilizaron inyecciones de formol, métodos de asfixia y si no morían les traspasaban fierros por el paladar hasta el cerebro”, “Terminada la masacre los amontonaron y los quemaron ante la impotente mirada de los niños”, expresiones como éstas nos traen a la memoria los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la Segunda Guerra Mundial en los campos de concentración y exterminio nazis contra inocentes considerados inferiores a ellos. Sin embargo, esto pasó nada más y nada menos que en nuestro país y en pleno Siglo XXI. ¡Qué aterrador! De nuevo se las ensañaron contra indefensos animales.

Acciones como éstas crean la imagen, ante la comunidad internacional, de un país habitado por gente bárbara, que hace escaso uso de la herramienta más poderosa que jamás haya existido en la historia del planeta. Tal herramienta no es otra cosa que la capacidad de pensar, para luego actuar como seres racionales que somos…. Imaginen el trauma que el macabro espectáculo dejó marcado en aquellos niños que lo presenciaron.

Las personas involucradas en este hecho deben ser sancionadas con todo rigor. No podemos atribuirnos derechos que no nos corresponden para cometer delitos, so pretexto de proteger a la población de las “dañinas mascotas”. Sepan que no se respetó en ningún momento las recomendaciones ni protocolos establecidos para aplicar la eutanasia de animales.

Seguro que lo sucedido en el municipio de Warnes ha ganado el repudio y la indignación de la mayoría de la ciudadanía boliviana, es necesario que a la brevedad posible se haga realidad la ley para penalizar la matanza de animales domésticos.

Yuri Mirko Ríos Madariaga