Entre Bolivia y Suiza

Sustento científico definirá pertenencia del Ekeko-Tunu


(ANF).- El Gobierno boliviano y el Museo de Historia de Berna en Suiza determinaron trabajar paralelamente en sustentos científicos que definan la pertenencia de la pieza arqueológica denominada Ekeko-Tunu, la cual, de acuerdo al Ministerio de Culturas, fue despojada a los indígenas Tiahuanacotas en 1858, por parte del arqueólogo suizo Johann Jakob von Tschudi.

Se trata de una estatua de la Illa del Ekeko que mide 15,5 centímetros de alto y nueve de ancho y a pesar de su pequeño tamaño, es de gran significado cultural y religioso para los pueblos indígenas de Bolivia, fundamentalmente para los aymaras.

En ese sentido, es que una delegación boliviana conformada por el viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas; el viceministro de Relaciones Exteriores, Juan Carlos Alurralde; la embajadora de Bolivia en Alemania y Suiza, Elizabeth Salguero, y los amautas Gladis Quenta y Wañay Pacha, visitó el Museo de Berna en Suiza para reunirse con los directivos de esta institución a objeto de recuperar la estatua.

“Lo que finalmente hemos quedado es que hagamos un último paso que es un sustento científico de que el Ekeko realmente nos pertenece (…). Necesitamos trabajar por ambos lados, el museo contratará a alguien, nosotros también, mejor si es de Suiza, estamos buscando la persona adecuada que ha estado también metido en el tema del retorno del Ekeko”, informó a la ANF el viceministro Cárdenas.

Además, el Viceministerio se fijó como meta que el retorno de la pieza sea para el 21 de junio de este año, fecha en la que se celebra el Año Nuevo Andino Amazónico, por lo que, anticipó Cárdenas, la investigación comenzaría en febrero y los resultados se mostrarían para finales de abril.

DELEGACIÓN BOLIVIANA EN SUIZA

Sobre la visita al Museo de Historia de Berna, la autoridad dijo que cuando llegaron se dio un momento “emotivo”, pues los amautas que conformaron este grupo emprendieron una ceremonia donde “pijcharon” coca e invocaron al Ekeko-Tunu para que vuelva al país. “Los amautas lloraron al ver al Ekeko y se incaron frente a él”, relató.

Los bolivianos que radican en Suiza recibieron a la delegación con una fiesta cultural. Según Cárdenas, lo más significativo del viaje fue que el Ekeko-Tunu, que anteriormente estaba clasificado como pieza arqueológica peruana al interior del Museo, se cambió por el de “Ekeko de Tiahuanacu”.

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