Bolivia registró 10.44% de inflación en alimentos en 2013, siendo que tuvo la segunda más alta de Sudamérica, detrás de Venezuela, según la Fundación Jubileo, aunque las autoridades gubernamentales no comparten los datos de esta evaluación.
La ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, dijo ayer que “los bolivianos comen cada vez más y mejor y que los mayores ingresos no solamente están llegando a los bolsillos, sino también al estómago”.
La Fundación sostiene que hasta julio de 2013, el precio de los alimentos en el país estuvo parcialmente controlado, pero en agosto y septiembre se registró un considerable incremento del precio de los productos. Además, indica que los esfuerzos realizados por el Gobierno para estabilizar el precio de los alimentos en el último trimestre no habrían alcanzado reducir estos niveles.
Para la ministra Morales, “las familias bolivianas ahorraron el año pasado alrededor de Bs 800, producto de los precios justos en la canasta de alimentos, donde muchos de ellos gozan de subsidio”.