Rescató un punto

El equipo de Real Potosí ayer rescató un punto en su casa al empatar ante Guabirá por 1 a 1. El partido de la cuarta fecha se jugó en el estadio Víctor Agustín Ugarte donde el campo de juego no mostró su mejor cara debido a las constantes lluvias que cayeron en esta ciudad.

Un sorpresivo gol que llegó en la primera etapa de juego hizo que toda la estantería del plantel local se venga al piso, pues tardó demasiado en reaccionar pese a que comenzó el juego con dominio de balón ante un plantel que había llegado a defenderse.

De La Torre mostró a un elenco ordenado e inteligente, porque aprovechó el malestar de su rival, cerró los espacios cuando era necesario para evitar cualquier contratiempo en su área. Además el gol que había marcado cuando nadie lo esperaba también les dio la confianza que necesitaban para sacar ventaja en un reducto que fue difícil administrar el balón.

Sobre llovido mojado, el equipo local no sólo tuvo que lidiar con el gol en contra desde el minuto 11, también con un penal mal ejecutado, el árbitro del compromiso el cochabambino Hostin Prado siguió las jugadas del partido de muy cerca, cuando se jugaba 25 minutos cobra la pena máxima.

La primera conquista del compromiso fue convertida en el minuto 11, cuando desde más de 40 metros en un despeje de los rojos, Darwin Ríos decide seguir el trayecto de la pelota sin marca alguna, el jugador se mete en el área de peligro donde el arquero Henri Lapczyk comete un grave error y se decreta el 0-1 ante la sorpresa de todos.

La segunda etapa no cambió mucho, el que generaba juego era Real Potosí pero Guabirá estaba muy concentrado en su área y no permitió que ingresen los hombres del plantel lila, los ataques fueron rápidos y hasta probaron puntería de larga distancia, pero el arco se les había cerrado hasta que en el minuto 74 se decreta el 1 a 1.

Nicolás Bubas se encargó de igualar el marcador (el jugador había ingresado en la segunda mitad del encuentro) estaba muy atento cuando se genera una jugada rápida y coloca la cabeza ante la sorpresa del arquero de Guabirá quien había tapado todas las llegadas, esta vez la pelota ya había ganado a su pórtico.