Oruro experimentó desde el año 2005 incrementos continuos de su ingreso per cápita, con tasas superiores al 5 por ciento; sin embargo, el 2012 cambió el panorama como consecuencia de la caída de 5.5 por ciento en este indicador.
La retracción de la minería en 17 por ciento impactó negativamente en el PIB regional, lo que expresa la importancia de esta actividad en el departamento, ya que sin dicha contracción el resultado del producto hubiera sido positivo, sostiene la Fundación Milenio, en ocasión de conmemorarse el 233 aniversario del grito libertario del 10 de febrero de 1781.
El sector que más creció en 2012, comparado con 2011, fue la construcción, seguido de los establecimientos financieros y electricidad, gas y agua.