Como consecuencia de las inundaciones registradas en el departamento de Beni en las últimas semanas, 140.000 reses murieron ahogadas y por falta de alimentos, informó el presidente de la Federación de Ganaderos del Beni, Mario Hurtado.
El representante ganadero manifestó que la situación por la que atraviesa Beni es crítica, motivo por el cual salió de la región para pedir ayuda a la población cruceña.
Sostuvo que muchos ganaderos se encuentran aislados, sin poder salvar a los animales que en algunos casos recorrieron distancias largas, buscando tierra firme.