Beni, EL DIARIO.- Un informe oficial de la Federación de Ganaderos del Beni (Fegabeni), mediante su presidente Mario Hurtado, revela que hasta el momento, aproximadamente, más de cien mil cabezas murieron en las distintas regiones que por tradición son ganaderas y, debido a lo sorpresivo de las riadas, apenas se pudo salvar lo que estuvo a la mano.
Pese a que el Gobierno facilitó chatas y combustible en los últimos días, perece ser muy tarde la reacción, ya que los ganaderos tuvieron que hacer escapar parte del ganado al sector cruceño, aunque muchos se quedaron flotando en el agua.
Un total de seis provincias ganaderas están totalmente con pérdidas directas pues, según se conoce, más del 50 por ciento de los tres y medio millones de cabezas murieron por las inundaciones. Los animales trataron de buscar zonas más altas y en su intento se quedaron en el camino y por la cantidad fue difícil trasladarlos a todos a otras regiones secas.
El representante afirma que la gran dificultad está en la falta de medios de transporte como lanchas, barcazas y motores fuera de borda que impiden llegar con alimentos a las regiones ganaderas. “Solamente tenemos una embarcación que hace cinco días partió a una estancia y no retorna hasta el momento”, indicó.
Mientras pasa los días se complica aún más el panorama, ya que es complicado salvar el ganado, ya que no se cuenta con la logística necesaria en algunos casos para ubicar y evacuar al ganado de las estancias ganaderas, “muchos animales no se pueden recuperar y estamos tratando de salvar, colaborar con los colegas benianos para que se trasladen a la ciudad cruceña”, atinó a decir Julio Roda, titular de la Cámara Agropecuaria del Oriente.
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