Fabricantes de armas festejan mientras niños sufren hambre

Ciudad del Vaticano.- El papa Francisco lanzó ayer una nueva y dura denuncia por la insensibilidad ante las guerras que se libran en todo el mundo y destacó que los fabricantes de armas festejan mientras los niños pasan hambre en los campos de refugiados.

“Piensen en los niños hambrientos en los campos de refugiados y después piensen en los grandes salones, en las fiestas que organizan los propietarios de las industrias que fabrican armas”, dijo Francisco en su homilía de la misa que cada mañana celebra en su residencia, la Casa de Santa Marta, informó Efe.

“Los muertos parecen formar parte de una contabilidad cotidiana. Estamos ya acostumbrados a leer estas cosas. Si tuviéramos la paciencia de enumerar todas las guerras que en este momento se libran en el mundo, seguramente rellenaríamos varias hojas”, afirmó el Papa.

El pontífice lamentó que mientras “se organizan actos para conmemorar el centenario de la Gran Guerra, con tantos millones de muertos y todos nos escandalizamos, nada ocurre ahora, cuando pasa lo mismo”.

“¡Parece que la guerra se ha apoderado de nosotros!”, exclamó.

“En vez de una Gran Guerra hay pequeñas guerras por todo el mundo y pueblos divididos que para conservar su interés se matan entre ellos”, deploró.