Se dio un festín

El Real Madrid acabó ayer lo que se ha llamado la “maldición alemana” al golear al Schalke 04 en Gelsenkirchen por 1-6, con dobeletes de Benzema, Bale y Cristiano Ronaldo, y puso de paso más de pie y medio en los cuartos de final de Liga de Campeones.

Los españoles ya pueden hacer planes para cuartos de final y además la noche de ayer puede haber sido un exorcismo eficaz para ahuyentar los fantasmas que solían aparecer antes de cada visita a Alemania.

Mientras tanto, el Galatasaray y el Chelsea empataron ayer 1-1 y aplazaron hasta dentro de dos semanas en el estadio londinense de Stanford Bridge la resolución de su eliminatoria de octavos.

La temprana ventaja del Chelsea con un gol en el minuto 9 de Torres parecía certificar la opinión de Didier Drogba, que había calificado a los ingleses de “diez veces mejores”.

En el minuto 64, cuando uno de los muchos ataques del Galatasaray permitió sacar un córner a al holandés Wessley Sneijder, que remató a bocajarro Chedjou para equilibrar el marcador.