Autoridades del Beni preocupadas por alimentos y posibles enfermedades

Autoridades del Beni ahora se preocupan del sostenimiento de alimentos para los damnificados y la propagación de las epidemias que puedan presentarse al bajar el nivel de las aguas.

Mientras que en Santa Ana del Yacuma, aún se mantienen las aguas, pero no existe peligro por el momento, debido a que las mismas están controladas, lo propio en San Rosa. Lo problamático es que ahora aparecen más familias damnificadas en las comunidades.

Mientras que en San Ignacio de Moxos, según los reportes de los mismos comunarios, el mayor problemas es la alimentación a los damnificados, ya que el número de familias afectadas y las pocas raciones que quedan en el sector han provocado un descontento entre las personas.

El alcalde de San Ignacio de Moxos, Basilio Nolvani, inicialmente determinó recortar la entrega de raciones a los afectados , pero los mismos protestaron y casi obligado la autoridad tuvo que reponer nuevamente la ración de los primeros días.

En Santa Rosa el panorama es más halagueño, porque las aguas efectivamente descendieron, pero ahora viene lo más duro, preocupa la reconstrucción de la infraestructura caminera dañada y la pérdida de miles de cabezas de ganado y se necesita forraje para los animales sobrevivientes, puesto que el pasto desapareció y prácticamente están confiados en la ayuda del Gobierno central.

En Reyes, la situación es más positiva, ya que los militares vienen colaborando con la fumigación de las viviendas y todo lo que encuentran a su paso. Entretanto las familias intentan dar una solución al tema de sus casas que en algunos casos quedaron totalmente dañadas, pero tienen la intención de retornar a sus hogares y que los niños de manera paulatina retomen sus labores escolares.

En la ciudad de Rurrenabaque, donde las aguas del río Beni han descendido en los barrios afectados, especialmente en el municipio, funcionarios del Servicio Departamental de Salud se movilizan con el objetivo de prevenir la enfermedad del dengue con fumigaciones, durante casi todo el día y continuarán en esa labor el fin de semana en diferentes lugares.

El caso es diferente de Riberalta, porque el arroyo denominado Florida, que amenazaba con inundar la carretera entre Riberalta y Guayaramerín, descendió.

Contrariamente, todavía están aisladas siete comunidades del municipio.

RECONSTRUCCIÓN

El Gobierno, de manera oficial, prevé iniciar la próxima semana tareas de reconstrucción en zonas afectadas por lluvias y Defensa Civil continúa el desplazamiento de ayuda humanitaria a los lugares afectados por las lluvias a través del traslado de alimentos, vituallas, medicamentos y la evacuación de personas que se encuentran varadas en lugares anegados, según el ministro de Defensa, Rubén Saavedra.

Las tareas del Gobierno y el brazo operativo de las Fuerzas Armadas se extendieron también a través del apoyo a los ganaderos con embarcaciones para evacuar cabezas de ganado en riesgo, además de proporcionarles forraje para la alimentación de los animales y asistencia técnica con veterinarios del Senasag, indicó la autoridad.

COOPERACIÓN

Por otro lado, la cooperación internacional ofreció ayuda al Gobierno nacional para atender a los afectados, señaló la autoridad al referirse a la Organización de las Naciones Unidas con la dotación de 2.000 carpas, cuyo traslado desde Panamá corrió a cargo de nuestro país. La Corporación Andina de Fomento colaboró con 100 mil dólares para la atención de emergencias; el Banco Interamericano de Desarrollo también ofreció 200 mil dólares.