Gobernador confirma que dos represas brasileñas influyen en corrida de agua

El gobernador del departamento de Beni, Carmelo Lens, confirmó que dos represas brasileñas influyen en el curso de la corrida de agua que termina afectando a la región, situación que había sido denunciada hace meses. Para abril se tiene prevista la llegada de la delegación del vecino país para abordar el tema con autoridades del Ejecutivo.

El caso de las represas llegó a niveles superiores y pese a la bajada del caudal en la amazonía boliviana, el agua ahora llega a siete de las ocho provincias del Beni.

La autoridad departamental, en entrevista con la red Gigavisión, confirmó que tanto Jirau como la represa San Antonio tienen influencia en Beni porque “obstruyen la normal corrida del agua”, situación que fue “denunciada permanentemente” a las autoridades del Gobierno central.

Asimismo, en contacto con Cadena A, Lens advirtió que el agua ya llegó a Santa Ana de Yacuma y en la madrugada del jueves hasta la provincia Mamoré. “La fuerza del agua ha roto el dique e ingresó a dos cuadras de la plaza principal, es decir en el centro de la población”, denunció el Gobernador.

La Gobernación está trabajando en coordinación con el ministro de Gobierno, Carlos Romero, a quien Lens solicitó el vuelo de dos helicópteros para trasladar a San Joaquín alimentos y vituallas a la gente que es trasladada a albergues de la Gobernación.

Por su lado, el canciller del Estado, David Choquehuanca, confirmó la llegada de su par brasileño Luiz Alberto Figueiredo el 7 de abril para tratar el caso de las represas e hidrocarburos entre otros particulares.

“Hemos quedado que una comisión binacional trabaje algunas inquietudes que han surgido a raíz de las inundaciones que han sufrido nuestros hermanos en el oriente boliviano. Uno de los factores podría ser esta construcción de las represas”, declaró.

En 2009 un estudio del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y el L’Institut de Recherche pour le développement (IRD) anticipó los riesgos e impacto de estas construcciones para la región boliviana. Para ese año se produjo un encuentro bilateral, donde efectivamente Brasil reconoció que se debía analizar el diseño de la curva de guía que implica el nivel y volumen de embalse, pero la constructora Odebrecht prosiguió con la construcción.

Delegaciones de ambos países que trabajaron en una comisión cesaron encuentros bilaterales sobre el tema, hasta la anunciada reunión del próximo mes.

Según el estudio Megarepresas y energía de Marco Octavio Ribera, publicado por la Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema), “uno de los elementos que puso fin al funcionamiento de esta comisión, fue la imposibilidad de poder realizar mayores aportes, más allá de la denuncia y la alerta, puesto que además todo proceso de negociación bilateral está enmarcada en la ‘agenda positiva’ entre Bolivia y Brasil, una agenda conciliatoria que considera otros temas energéticos, como el hidrocarburífero la cual tiene preminencia en los niveles de decisión máximos del gobierno y que elimina cualquier posibilidad de un planteamiento firme de rechazo por parte de la diplomacia y Gobierno boliviano”.

DATOS

Santo Antonio. Energía asegurada 2.218 MW/h. Precio final de la energía $us 39.4 MW/h. Potencia instalada 3.150 MW/h, potencia unitaria 71.6 MW. Turbina Bulbo con rotor Kaplan 44 unidades. El Consorcio Odebrecht – Furnas se adjudica San Antonio por 5.000 millones de dólares.

Jirau. Longitud de la represa 2 kilómetros. 40 turbinas Bulbo. Potencia instalada 3.300 MW/h. Energía asegurada 1.975 MW/h. El consorcio del grupo franco belga GDF/Suez Electrosul y otras empresas brasileras se adjudican Jirau por 5.300 millones de dólares. (Lidema)