Mujeres del área rural aún son víctimas del machismo

A casi un año de la creación de la Ley 348, la situación de la mujer de las provincias no ha cambiado, debido a que el machismo tan arraigado en la cultura y tan diferente a la de la mujer capitalina, hace que sigan sufriendo violencia a lo que se suma el desconocimiento de sus derechos y el mal uso de los fondos destinados a la sensibilización de género, señaló el comunicador del Centro de Desarrollo Integral de la Mujer Aymara (Cedima), Gabriel Tenorio.

“La situación de las mujeres no es la misma en el campo que en la ciudad, existe mucho machismo en el área rural y muy pocas instituciones que trabajan en esta temática de la no violencia hacia ellas y son mucho menos las del gobierno nacional”, señaló Tenorio.

Pese a que existen nuevas normativas como la Ley 348, por su cultura, forma de vida y la poca información que las mujeres tienen sobre sus derechos, aún persiste el machismo, haciendo que la situación para las mujeres de las provincias no haya cambiado nada.

“Basta ver que en reuniones o en cabildos las mujeres siempre están a un lado y son los hombres los que llevan adelante las reuniones, ellas sólo deben escuchar sobre las decisiones que se tomen, y no sé si es costumbre o machismo pero los hombres siempre van adelante y las mujeres se quedan atrás”, señaló el comunicador de Cdima.

En estos lugares, las mujeres soportan los golpes cuando el hombre está bajo efectos del alcohol y de los celos, como lo sucedido en la localidad de Vilque, donde una mujer con siete meses de embarazo murió durante los feriados de carnaval, a manos de su propio esposo.

Hace algún tiempo si bien se le dio a la mujer el derecho propietario sobre las tierras, muchas de ellas aún no conocen en que consiste, porque en estas comunidades los hombres mantienen las propiedades a su nombre y no al de sus parejas.

“A pesar de existir normas, al desconocerlas aún existe machismo pese a que instituciones del estado mencionan que con las leyes mejoró la situación, lamentablemente vemos que no es cierto. Sólo si hablamos de los municipios, la población en general no tiene conocimiento sobre el presupuesto sensible a género”, manifestó Tenorio.

Según Tenorio, son las mismas autoridades municipales, las que no dan información a la población sobre este presupuesto, que debería ser destinado a actividades como seminarios, talleres de información y cursos de capacitación, en diferentes temáticas relacionadas con las mujeres, por motivos que se desconocen.

En una investigación que realizó el Cdima, en un municipio de la provincia Camacho, se llegó a verificar que existía un presupuesto sensible a género, pero cuando se les pide información de este, las autoridades simplemente “se hacen de la vista gorda”.

“Las mujeres en el área rural son muy tímidas y eso las hace muy vulnerables, de eso se aprovechan los varones, podría ser parte de su cultura o costumbre, pero los cierto es que esto forma parte de su vida diaria”, finalizó Tenorio.