Vicepresidente García tilda de delincuentes a Soza y Ormachea

Las revelaciones publicadas por el exfiscal Marcelo Soza y el expolicía Fabricio Ormachea que vinculan a autoridades del Órgano Ejecutivo en supuestos actos de extorsión y corrupción fueron calificadas por el vicepresidente Álvaro García como un “baile de delincuentes” de quienes no tienen ninguna credibilidad. En tanto, la oposición pide al Gobierno que si no tiene ninguna culpa en estos casos, se someta a las investigaciones internacionales ante la crisis de la justicia que se vive en Bolivia.

Con toda clase de adjetivos reaccionó García para referirse a la polémica que se levantó tras las “revelaciones” de Ormachea, grabado en un video que utilizó el FBI para encausarlo en el acto de extorsión al empresario cruceño Humberto Roca, radicado en Estados Unidos.

“Son palabras entre delincuentes y mañas entre delincuentes utilizadas para atacar políticamente al Gobierno. Ese es el fondo del asunto. El señor Ormachea que ha dicho tal y tal cosa del Gobierno, pero claro, qué hace un delincuente, qué armas utiliza un delincuente, las armas de la falsedad para chantajear a otro delincuente”, afirmó.

Sobre Ormachea, quien dijo que recibía instrucciones concretas y directas de García, incluso aludiendo charlas entre “hermanos”, el Vicepresidente deslindó cualquier relación que hubiera tenido con el exdirector de la Unidad Anticorrupción de la Policía, procesado en Bolivia por incumplimiento de deberes.

“Ni lo conozco a ese señor. Mi única relación con los policías es mi seguridad. Hemos revisado los datos computarizados de la Vicepresidencia porque dice que me conoce que me hablaba a cada rato, y no está el señor Ormachea, hay otros Ormachea, pero no está el tal señor Ormachea sentenciado a 25 años y ni siquiera ha dejado una nota”, mencionó.

En respuesta, el jefe de la bancada de Diputados de Convergencia Nacional (CN), Alex Orozco, pidió al Vicepresidente que deje de especular sobre su inocencia y en lugar de ello, se someta a una investigación profunda y demuestre que en el gobierno de Evo Morales no hay delincuentes fungiendo como funcionarios públicos.

“Si no hay nada que temer lo que tienen que hacer las autoridades de Gobierno es someterse y demostrar que en el gobierno de Evo Morales no hay delincuentes, aunque los hechos demuestran todo lo contrario: Ormachea, Sanabria, Soza y muchos a los que hoy han llamado delincuentes han tenido estrecha vinculación política con el Gobierno. Si no hay nada que temer todos los bolivianos debemos someternos a una investigación”, sostuvo.

“(García) Linera no es dueño del país y menos de la verdad para negarnos a los bolivianos la posibilidad de que organismos internacionales coadyuven en la investigación del caso terrorismo, como ya lo solicitó el Parlamento Europeo el 21 de noviembre de 2013 a través de una resolución que pide un juicio justo e independiente”, agregó Orozco.

La diputada de Unidad Nacional (UN), Elizabeth Reyes, por su lado, presentó la nota anunciada a la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Bolivia, solicitando su intervención en las investigaciones de los casos de extorsión, corrupción y terrorismo – separatismo, ante la poca credibilidad y retardación de justicia de los operadores en el país.

Reyes lamentó las palabras de García y aseguró que se trata de un régimen que enfrenta una severa crisis moral y ética, por lo que tratarán de minimizar y echar la culpa a terceros, o en este caso a personas y funcionarios que no están en el país y con quienes las autoridades trabajaron de forma íntima.

CONTROL A MEDIOS

Una investigación del periodista Raúl Peñaranda desnudará la relación y acción del despacho de la Vicepresidencia con medios de comunicación copados por el Gobierno, se anunció.

En tal sentido, el vicepresidente Alvaro García aseguró que “tiene cosas más importantes que hacer” que dirigir la línea editorial de los medios, llamados paraestatales por Peñaranda, como los canales PAT, ATB, FullTV y el periódico La Razón.