BIENESTAR
La meditación crea un espacio para encontrarse consigo mismo, con esa paz interior que no logramos por diversos motivos, ya sean personales, laborales o familiares, los que generan altos niveles de estrés.
Para ayudar a conseguir la paz mental, voluntarios de “El Arte de Vivir” organizan dos cursos: técnicas de respiración y meditación, y meditación Sahaj Samadhi.
Ambas actividades se realizarán por tres días y estarán dictadas por el instructor Alejandro Martínez, con más de 16 años de experiencia. En el primer curso se aprenderá técnicas de respiración y meditación para incrementar la energía, eliminación de toxinas, estrés y tensiones.
“Meditar es el delicado arte de no hacer nada, de soltarlo todo, de estar en el momento presente y entrar en contacto con nosotros mismos. Sahaj Samadhi es una técnica de meditación natural y sin esfuerzo, que permite a la mente y al cuerpo descansar para reponerse rápidamente”, explicó Martínez.
Estas experiencias servirán como parte introductoria de las actividades que realiza la Fundación “El Arte de Vivir” que tiene presencia en 151 países. Fue fundada en 1981 por el guía espiritual que denominan Sri Sri Ravi Shankar con objetivos educativos y humanitarios para tratar el estrés, depresión y tendencias violentas.
“Estos programas están guiados por la filosofía de paz de Shankar que dice: ‘A menos que tengamos una mente libre de estrés y una sociedad libre de violencia, no podremos alcanzar la paz mundial’. El objetivo es ayudar a los individuos a deshacerse del estrés y a experimentar la paz interior lejos de la depresión y tendencias violentas”, explicó el instructor.
Esta fundación se ha dedicado a difundir un mensaje de paz en las comunidades a través de diversos proyectos humanitarios como resolución de conflictos, alivio de traumas producto de desastres, potenciación de las mujeres, rehabilitación de reclusos, educación para todos y cuidado medio ambiental, entre otros.
TESTIMONIOS
Dos voluntarias bolivianas de esta organización cuentan su experiencia personal, luego de conocer las técnicas de respiración y meditación, afirman que estás enseñanzas cambiaron sus vidas en forma significativa y lo que ahora buscan es que esta forma de bienestar se difunda entre familiares, conocidos y púbico en general.
“Realicé el curso hace 6 años, de cierta manera un poco incrédula y obligada por la situación de salud que atravesaba. El instructor fue un argentino. Al estar ahí fue experimenté un cambio trascendental, me sentía en paz conmigo misma, modifiqué mi forma de pensar y con estas prácticas te puedo decir que yo volví a nacer”, recordó Cecilia Prudencio voluntaria de “El Arte de Vivir”.
La voluntaria no se quedó ahí con el conocimiento adquirido, sino que organizó un grupo para realizar un trabajo voluntario con jóvenes del Centro de Rehabilitación de Qalauma, en Viacha, con la finalidad de ofrecerles una esperanza en sus vidas y, pese al miedo que en principio sintió, se llevó una gran enseñanza de esta población.
“Nunca había estado detrás de rejas y tuve un poco de miedo, pero me enfoqué en el propósito que tenía, semana tras semana el trabajo fue más tranquilo y al salir nos sentíamos como hermanos. Cero temores, nadie se puede imaginar que estas personas que cometieron un error son capaces de tener tanto amor en su corazón. Aprendieron a amar al prójimo y a liberarse de aquello que les molestaba”, explicó Prudencio.
Jeloska Irusta es otra de las voluntarias que trabaja en esta fundación y que asistió a una de las charlas introductorias de los cursos que difunde la organización “El Arte de Vivir”. Su primera motivación fue que le serviría en su profesión como fisioterapeuta y al final se dio cuenta que esta enseñanza le serviría como una forma de vida.
“Yo ingresé en el curso por casualidad, debido a mi profesión de fisioterapeuta, pensé que esto les iba a encantar a mis pacientes y la experiencia fue increíble, uno va sintiendo los cambios, tu mente se tranquiliza y te vuelve más cariñosa. Como toda joven, todo era fiesta y bebida, no estaba disfrutando de la vida, porque no tenía esa paz interna. Ahora me siento más plena”, expresó convencida Jeloska.
CURSOS
Los cursos que se dictarán del 28 al 31 marzo tienen como principal objetivo el otorgar a los participantes las herramientas básicas necesarias para manejar el estrés, las emociones negativas mediante ejercicios de respiración, extensión de yoga y meditación.
“El punto de partida que deseamos comunicar integra muchos aspectos, porque si uno se siente bien, sin tensiones y sin estrés, es cuando comienzan a florecer las cualidades lindas: la amistad, la comunicación, la paciencia, tolerancia, el descansar mejor, el manejar las emociones, el no enojarse tanto. Todo surge naturalmente en nuestro sistema, se van las tensiones que son toxinas”, expresó Martínez.
Gracias a la respiración se crea un vínculo entre el cuerpo y la mente, ésta sería la clave para el manejo de la mente y las emociones negativas, para explotar el verdadero potencial en cuanto a trabajo, hogar y ocio se refiere.
“El conocimiento de ti mismo te otorga una limpieza del sistema nervioso. Estas herramientas te permiten estar relajado y tranquilo, además de practicar algunas posturas de yoga. El enojo, la depresión o las malas noticias serán atenuados para evitar que te enganches con éstos, te pierdas oportunidades y accedas a tener un lenguaje de control sobre tus emociones, además veas que la vida es algo lindo para vivir”, finalizó el instructor.
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