El bloqueo de caminos que mantienen los cooperativistas mineros, pese a que el proyecto de Ley de la Minería quedó en fojas cero en el Legislativo, fue repudiado por la población, principalmente por los viajeros que no cuentan con recursos para permanecer en La Paz.
En la tercera jornada de la medida de protesta, las trancas y la terminal continuaron cerradas, debido a que las principales rutas camineras fueron inhabilitadas por bloques de piedras y promontorios de tierra, siendo los más afectados los niños y personas de la tercera edad.