El defensor del Pueblo, Rolando Villena, informó ayer que en Bolivia las niñas, niños y adolescentes se enfrentan principalmente a cuatro grandes problemas: la violencia, pobreza, explotación y abandono.
De acuerdo al informe oficial pese a que las políticas públicas eficientes, de alguna manera, han logrado disminuir los niveles siguen siendo alarmantes.
En Bolivia unos 850.000 niños, niñas y adolescentes, que representan el 28% de la población de entre 5 y 17 años, realizan diferentes actividades económicas: 397 mil en las ciudades y 452 mil en el campo.
De estos, más del 87% está inmersa en trabajo infantil peligroso que pone en riesgo su salud, su integridad física, mental y dignidad. Entre los trabajos peligros se identifica a la zafra de caña, la recolección de castaña, la minería, pesca, ladrillería, venta de bebidas alcohólicas, recolección de basura, limpieza de hospitales, servicios de protección y seguridad, trabajadoras del hogar y voceadores del transporte.
En cuanto al abandono, cada año 900 infantes, niños y niñas son abandonados en el país, muchos de ellos dejados en las calles o en basureros. De este total, el 40% queda en orfandad. En estos casos los y las menores son derivados a hogares y centros de acogida, donde deben esperar a ser adoptados. El resto, a pesar de haber sido olvidados por sus padres, aún cuenta con familia extendida que pueden hacerse cargo de ellos.
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