Familias paceñas erogan 400 a Bs 500 para preparar 12 platos

Las familias paceñas destinaron un presupuesto de 400 a 500 bolivianos para realizar la compra de los ingredientes de los tradicionales platillos de la festividad de Semana Santa, que se celebra en el mundo católico a partir de este jueves.

Las familias más apegadas a las costumbres generalmente evitan el consumo de carnes rojas.

Según la tradición católica, en esta festividad se evita el consumo de carne para recordar el sufrimiento de Cristo quien derramó su sangre para salvar de pecado a humanidad. La demanda de pescado, mariscos, bacalao y el infaltable cochayuyo, que es una especie de alga marina muy consumida en estas fiestas, creció en las últimas horas en los principales mercados de consumo, tanto de la ciudad de La Paz como de El Alto.

Los 12 platos es tradicional^en Semana Santa: Sopa de Pan, Ají de Habas, Caldito de Semana Santa, Nogada (con bacalao), Ají de Lisas, Arroz con Leche, Sajta de Papalisa, Chuma de Lacayote, Ají de Cochayuyo, Sopa de Camarón, entre otros.

PRODUCTOS

Los precios de los pescados, las frutas y verduras pueden variar de un mercado a otro; incluso, el presupuesto puede ser mayor dependiendo a la cantidad de personas por familia o si las compras se las realiza en un supermercado donde venden alimentos seleccionados e importados. En Bolivia el promedio de cada familia es de cinco miembros.

Las ofertas en los mercados son variadas. Una visita de EL DIARIO a los principales mercados de la ciudad evidenció que los productos más solicitados son la trucha, el pejerrey, el “hisp’i”, camarones, bacalao y otros. El bacalao noruego es el más caro en los puestos de abasto, pero hay oferta chilena y peruana de este mismo producto a precios más bajos.

TESTIMONIOS

Algunas amas de casa se quejan que los precios de los alimentos suban cada año, mientras que las comerciantes no dejan de preocuparse por la baja demanda de pescado.

“No alcanza la plata para nada, gasté Bs 200 comprando solamente trucha. Cada año sube y sube de precio”, afirmó Sofía Vargas, mientras realizaba las compras por Semana Santa en el céntrico mercado Camacho.

En este centro de abasto se encontró muy pocos comerciantes que se dedicaban ayer a la venta de mariscos y productos de mar. El movimiento de amas de casa era escaso.

Para la vendedora, Rosario Sánchez, ello se debió a que sus clientes prefieren adquirir, los ingredientes -en estas ocasiones- de comerciantes ambulantes donde el precio es menor y varía entre uno a dos bolivianos, pero el “peso no es exacto”, advirtió. La higiene es un eterno problema en la venta ambulante.

PRECIOS

En el mercado Camacho, se pudo encontrar una variedad de pescados. La libra de trucha de tamaño pequeño se vendía a Bs 15, y de tamaño mediano a Bs 18 y los grandes a Bs 25; el kilo de mariscos se cotizaba a Bs 120, mientras que el kilo de camarones entre Bs 100 a Bs 140 dependiendo el tamaño y el corte (con o sin cola). El kilo de “Surubí” se expendía a Bs 45 y el filete a Bs 50.