No todos los derechos humanos son cumplidos en las FFAA

La representante nacional de las esposas de militares, Sandra López, con documentos en mano, aseguró que no se cumplen los Derechos Fundamentales establecidos en la Constitución Política del Estado (CPE) al interior de las Fuerzas Armadas (FFAA), siendo los mismos aplicados de forma diferente para oficiales como para las otras jerarquías menores.

En la CPE, en el artículo 15.I, se establece que “toda persona tiene derecho a la vida y a la integridad física, psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos crueles, inhumanos, degradantes o humillantes”, aspecto que para López es frecuentemente vulnerado al interior de las FFAA donde los nuevos oficiales, como subtenientes, son quienes llegan a generar represalias, castigos y humillaciones en contra del personal subalterno.

Por otra parte, el artículo 18.I señala que “toda persona tiene derecho a la salud”, pero en el seguro militar de salud, los carnet que entregan para recibir este beneficio no son los mismos para todos los dependientes de las FFAA. “Los carnets de seguro para oficiales es de color azul, mientras que las familias de suboficiales, sargentos y otros grados de menor rango nos entregan un documentos con el fondo rojo, el cual diferencia entre oficiales y suboficiales”, afirmó.

Fuera de la diferencia de los carnets de salud, López detalló que en varios casos los médicos y enfermeras al interior de Cossmil, preguntan al que solicita ser atendido si el titular (funcionarios que depende de las FFAA) es oficial, sargento o civil, con la finalidad de aplicar un trato diferenciado tanto en la atención como en la entrega de medicamentos.

“Los que tenemos carnets con fondo rojo nos entregan medicamentos de origen chino, mientras que para los oficiales los medicamentos tienen origen de líneas farmacéuticas extranjeras de laboratorio internacional. Al interior de Cossmil los oficiales tienen acceso a la suite de atención, mientras que nosotros debemos esperar si existen camas vacías caso contrario incluso nos llegan atender en el pasillo, aunque la suite no esté ocupada porque es de uso exclusivo para los oficiales”, recordó.

López lamenta que los descuentos para la atención en salud son los mismos, en porcentajes, para ambos grados, pero las atenciones son diferenciadas. Asimismo, dio a conocer un supuesto caso reciente en el que Adriana M. L., quien la pasada semana tuvo una amenaza de aborto por las medidas de presión realizadas en pasados días por parte de las esposas de suboficiales y sargentos, al interior de Cossmil no quisieron atenderle entregándole sólo una tira de paracetamol y explicándole que sea la misma atendida en un centro de salud privado.

“Cossmil no convoca a examen de competencia para que sean profesionales capaces quienes atiendan a los pacientes, con calidad y calidez, por el contrario no respetan ni su juramento hipocrático y al ser parentesco de los uniformados, ellos aplican una atención discriminatoria y diferenciada para oficiales y para quienes tienen grados menores”, aseveró.

Asimismo, indicó que por semana entre se presentan entre tres a cinco casos de negligencia médica o maltrato al interior de Cossmil, pero dichos casos no pueden ser denunciados a ninguna instancia bajo la amenaza de ser sancionados o retirados de la entidad militar por lo que los familiares y funcionarios de baja graduación deben aguantarse de ser víctimas de maltrato, negligencia y discriminación.

Otro de los casos de derechos fundamentales que no se aplica, de acuerdo con la denuncia, es el referido en el artículo 17 de la C.P.E. referido a “toda persona tienen derecho a recibir educación en todos los niveles de manera universal (…)”. Siendo el acceso y reconocimiento a una formación superior sólo para oficiales y no para suboficiales y sargentos quienes sólo tendrían derechos a realizar cursos de técnico medio.

“Mi persona ha efectuado estudios de manera clandestina en una licenciatura, pero cuando se solicita convocatorias para ser parte de grupos definidos, no se toma en cuenta nuestra formación de educación superior y si nos pillan que estamos estudiando, directamente nos mandan a tratar en la rata, fichados para ser castigados o cambiados de destino de manera inmediata”, comentó el suboficial Franz Colque.

En el artículo primero inciso (i), de la propuesta en la restructuración de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas (LOFA), se propone que deba incluirse “la igualdad con el reconocimiento pleno del derecho de acceder en la misma condición de oportunidad de todos sus miembros a la educación, salud, capacitación y formación progresiva”.

Finalmente, el derecho a la vivienda es uno de los beneficios que los uniformados de baja graduación no tienen, al interior de las unidades militares, en la misma dimensión que los oficiales.