Luego de protagonizar las marchas de protesta, los familiares de suboficiales y sargentos demandaron garantías escritas del Alto Mando Militar para la reincorporación de sus hijos o esposos y que estos no sean transferidos a puntos fronterizos ni sean maltratados como parte de las represalias que podrían asumir los oficiales de las Fuerzas Armadas.
La representante de las esposas de sargentos y suboficiales, a nivel nacional, Sandra López, sostuvo que la movilización de uniformados, que reclaman la “descolonización” al interior de las Fuerzas Armadas, está siendo desarticulada mediante el cambio de destino repentino.
Por otro lado, los militares de baja graduación determinaron aceptar el diálogo con el Alto Mando Militar y enviar una comisión de la Asociación Nacional de Suboficiales y Sargento de las Fuerzas Armadas del Estado (Ascinalss) para que se atiendan sus demandas planteadas.
El suboficial Eloy Cartagena, quien fue alejado de la institución militar, expresó que esta comisión coordinará con los Suboficiales del Comando para que a través de los conductos regulares se haga conocer sus exigencias para eliminar el racismo y la discriminación en las Fuerzas Armadas, además de una igualdad en las diferentes unidades castrenses.