Trotskismo es reprimido en Día del Trabajador

Durante la movilización de la Central Obrera Boliviana (COB), un grupo del magisterio paceño militante del Partido Obrero Revolucionario (POR) fue reprimido por la Policía en el paseo de El Prado, con el argumento que podían provocar conflictos en el Día del Trabajador.

Los dirigentes del Magisterio Urbano de La Paz, Wilma Plata y José Luis Álvarez, denunciaron ayer que efectivos policiales gasificaron e impidieron que los maestros marchen en conmemoración a el Día del Trabajo, quienes se encontraban dando a conocer el pensamiento del Partido Obrero Revolucionario (POR) .

En consulta de EL DIARIO, Álvarez denunció el hecho como un atropello a la libertad de expresión tras haber sufrido la gasificación para desbloquear la manifestación sectorial.

“La Policía nos ha cercado y gasificado, los trabajadores nada tenemos que ver con Evo Morales. El Partido Obrero Revolucionario, en una muestra pacifica, buscamos hacer conocer nuestra posición”, dijo.

Por otro lado, Plata sostuvo que el atropello que sufrieron ayer fue algo inaudito: “Así como lo que hicieron también a los suboficiales y sargentos, nos han cerrado el paso y hemos quedado en manos de la Policía, como ustedes pueden cerciorarse, la Policía tenía el instructivo de cerrarnos la marcha pese a que nosotros estábamos de dos a tres cuadras de distancia”.

Según la dirigente, su interés no era ingresar a la plaza Murillo, sin embargo, la movilización se habría realizado con la finalidad de mostrarle a la sociedad la dependencia política y sindical del sector debido a que muchos sectores “hicieron conocer que el Gobierno estaría obligando a los trabajadores, bajo descuento, a participar en la movilización”, contó.

Asimismo, reprochó los actos de gasificación y denunció: “Una de nuestras compañeras fue golpeada, por lo que hemos tenido que reaccionar con lo que teníamos para nuestra defensa”, en referencia a activistas de derechos humanos que también estaban presentes en la marcha.

Los uniformados utilizaron gas pimienta para disuadir a la movilización de protesta, lo que obligó a que desvíen su recorrido hacia la avenida Camacho, pues fueron acorralados a la altura del cine teatro Monje Campero y tuvieron que retroceder hasta el Ministerio de Justicia, mientras tanto la cola de la marcha continuaba pasando por el carril de bajada de El Prado.