Álvaro Ríos Laguna
La película “El día después del mañana” se estrenó el 2004, el argumento relata que el investigador Jack Hall, fruto de una investigación en la Plataforma Larsen de la Antártica, alerta sobre el cambio climático podría derivar en una mini era del hielo, modificando el clima en todo el planeta, si bien, ninguna parte del globo está a salvo del clima glaciar, la parte que podría soportar mejor el impacto son los países que se encuentran más cerca de la Línea del Ecuador.
La Antártica es el cuarto continente más grande del planeta después de Asia, América y África, con una extensión de 14 millones de kilómetros cuadrados y se constituye en el reservorio más grande de agua dulce del planeta (aproximadamente el 80% de agua dulce), constituyéndose, el subcontinente sudamericano, en el territorio más cercano a éste, con una distancia de 1.000 kilómetros.
El 1 de diciembre de 1959 se firmó el “Tratado Antárquico”, con el objeto de utilizar la Antártida, exclusivamente, para fines pacíficos. En principio firmaron doce países, pero en la actualidad los Estados Parte son más de cincuenta; entre los países signatarios, siete tienen reclamos territoriales (entre los cuales se encuentran Argentina, Australia, Chile, Francia, Noruega, Nueva Zelandia y el Reino Unido), con base en la Teoría de la Defrontación, cinco países han expresado sus derechos antárquicos ante una posible división del continente (Brasil, Perú, Ecuador, España y Uruguay) y, adicionalmente dos países manifiestan que tiene fundamentos para reclamar (Estados Unidos y Rusia).
El “Tratado Antárquico” reconoce la libertad de la investigación científica así como el intercambio de información científica, de personal así como de observaciones y resultados científicos, en la actualidad existen cerca de cuarenta bases de más de veinte países que operan todo el año o durante algunas estaciones.
Adicionalmente se ha completado el “Tratado Antárquico” con el “Protocolo de Madrid”, sobre protección al medio ambiente antárquico y los ecosistemas dependientes y asociados, documento que crea un Comité para la Protección del Medio Ambiente, el cual tiene como principal función prestar asesoramiento y efectuar recomendaciones sobre la aplicación de dicho Protocolo. Adicionalmente, el mismo cuenta con un Anexos referido al Arbitraje como medio de solución de controversias entre los Estados Parte, respecto a la interpretación o aplicación del Protocolo.
¿El Estado boliviano debería o no ratificar el “Tratado Antárquico” y el “Protocolo de Madrid”?, la respuesta es afirmativa por lo siguiente, permitirá que nuestro país pueda dar el gran salto hacia la investigación sobre un territorio rico en microorganismos y especies, que nos permitirá desarrollar una mejor capacidad de resiliencia respecto del cambio climático.
No olvidemos que el agua dulce del mundo sólo es el 3% del total de agua existente y que, como el mayor reservorio de agua dulce del mundo, se debe preservar su integralidad.
El “Tratado Antárquico” y el “Protocolo de Madrid” son documentos que nos pueden ayudar a coadyuvar los esfuerzos para implementar medidas más efectivas en contra del cambio climático.
En el desenlace de la película se hace hincapié en que una eventual era del hielo es posible, como emergencia del cambio climático, lo cual, según la misma fuente, podría producirse en tiempos relativamente cortos; si fuera así ¿no sería preferible saberlo con anterioridad y desarrollar medidas de prevención?
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |