Cochabamba, (EL DIARIO).- Cientos de maestros urbanos, estudiantes y padres de familia marcharon ayer en Cochabamba rechazando la aplicación y carga horaria de la nueva ley educativa Abelino Siñani – Elizardo Pérez.
Cuatro maestros continúan en huelga de hambre por octavo día. Partieron desde la Federación del Magisterio Urbano, con pancartas, petardos y estribillos cientos de maestros, la tarde de este lunes, recorrieron las principales arterias del centro de la ciudad expresando su total rechazo al nuevo plan de estudios.
“Nosotros rechazamos la aplicación del plan de estudios y la carga horaria que nos está imponiendo el Gobierno y vamos a continuar movilizados. El Gobierno quiere imponer a los maestros dictar otras materias más quechua, ingles, artes plásticas y computación con las mismas 88 horas”, sostuvo el dirigente del magisterio urbano, Miguel Lora.
Según declaraciones de Lora, la nueva currícula educativa, reemplaza horas de materias científicas con nuevos contenidos y cosmovisiones andinas que en su criterio poco o nada contribuyen a la formación de los estudiantes.
“Lo grave es que con este modo de manejar la educación los más perjudicados son los estudiantes porque la calidad de la educación se va ir al suelo, van a tener dificultades para que puedan acceder a la Universidad porque se quiere dejar de lado el conocimiento científico”, manifestó.
Agregó que además de los contenidos, maestros especializados en determinadas asignaturas deben también dictar clases de materias que no conocen ni tuvieron formación en las normales.
“Hay profesores de Filosofía dictando repostería, colegas de Matemáticas dictando artes plásticas, se está improvisando la educación yendo en contra de los maestros y los estudiantes”, indicó.
HUELGA
Por octavo día, un grupo de cuatro maestros, continúa en huelga de hambre en uno de los ambientes de la Federación de Maestros Urbanos. Los profesores aseguran que continuarán con la medida hasta conseguir una respuesta a las demandas del sector por parte del Ministerio de Educación.
En este marco, el ministro de educación, Roberto Aguilar, quien arribó a Cochabamba la pasada jornada, calificó la medida como política asegurando que el nuevo contenido y carga horaria de la nueva ley educativa fue consensuado con la dirigencia nacional del sector antes de su aplicación que será gradual por cursos y niveles.
“Se están respetando los 88 horas de los maestros, es un grupo de personas que en caso de Cochabamba está desinformando y originando estas movilizaciones”, manifestó en declaraciones a los medios de comunicación.
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