Rehabilitación de carreteras vecinales tiene avance del 70%

La mayor afectación, en cuanto a las redes vecinales, se encontraría en los municipios de Teoponte, Guanay, parte de Apolo, Alto Beni, Palos Blancos, San Buenaventura, La Asunta e Inquisivi.


En cuanto a las vías departamentales se logró habilitar el 90 por ciento del sistema vial, pero aún se encuentran inhabilitadas las rutas hacia Apolo, Sararías, Lliquimuni, Cobendo y Papayani.

El 70 por ciento de las carreteras vecinales, dependientes de los municipios, que fueron afectadas por las intensas lluvias ya se encuentran transitables, sin embargo el 30 por ciento aún se encuentran inhabilitadas, lo que obstaculiza el acceso total a las redes fundamentales departamentales. Desde la Dirección de Alerta Temprana se espera que en el transcurso de las próximas tres semanas se puedan refaccionar los caminos restantes.

“Ya tenemos las carreteras intermunicipales e interprovinciales conectadas, en el 90 por ciento, en los tramos en los que tenemos aún cierto problema es en las carreteras vecinales, que son tuición de los municipios, y que no se han podido atender porque no había accesibilidad o recursos”, manifestó el director departamental de Alerta Temprana y Prevención de Riesgos, Hilarión Callisaya.

La mayor afectación, en cuanto a las redes vecinales, se encontraría en los municipios de Teoponte, Guanay, parte de Apolo, Alto Beni, Palos Blancos, San Buenaventura, La Asunta e Inquisivi, donde los derrumbes han colapsado con la capacidad de los municipios para atender este tipo de desastres, donde si bien existe la maquinaria, no se cuenta con combustible.

La autoridad informó que mediante normativa se ha demostrado que para concretar las compras municipales, el trámite toma su tiempo. “(El tiempo) transcurre y demora la reactivación de los caminos, por lo que se ha apoyado, desde Alerta Temprana, con combustible de forma inmediata”, manifestó la autoridad.

Señaló que el presupuesto de los municipios es muy bajo y que no les alcanza para hacer frente a todas las necesidades que se vieron durante y después de los desastres naturales, a los que se suma la falta de información y manejo de gestión pública, que hubiera agilizado la disposición de los recursos municipales.

“Muchos no llegan ni al medio millón de bolivianos, para afrontar las emergencias, y a pesar que salió una disposición para utilizar los recursos de otros proyectos, no se tuvo la socialización necesaria, ya que muchos de los alcaldes no sabían que podían hacerlo, cómo gestionarlo ni justificarlo ante el consejo municipal”, aclaró Callisaya.

En cuanto a las carreteras departamentales, si al momento se tiene un avance del 90 por ciento, aún se tendrían problemas en el trabajo de las rutas hacia Apolo, Sararías, Lliquimuni, Cobendo y Papayani, debido a la inestabilidad del terreno, por lo que en coordinación con el Servicio Departamental de Caminos, se tiene maquinaria que trabaja de forma constante en estos sectores.

Desde esta Dirección, se espera que en las próximas tres semanas se pueda refaccionar todas las carreteras, siendo que ya se ha avanzado en los accesos departamentales y con esto se facilitaría el ingreso de maquinaria y sobre todo combustible, hasta los diferentes municipios que no han podido encarar la reparación de sus redes camineras.

“Se prevé que estos desastres vayan en aumento y si no contamos con planes de prevención, en cuanto a infraestructura y recursos, la situación puede volverse insostenible, por lo que es de vital importancia empezar a prevenir”, finalizó Callisaya.

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