RIP Cossmil

Las medidas últimamente tomadas por el Gobierno respecto al primer paso para la universalidad del sistema de salud en Bolivia, repercuten también en una entidad que poco a poco va perdiendo su valor en relación con la autonomía y su sistema integral de organización, pues se trata nada menos que de la Corporación del Seguro Social Militar.

Es bueno recordar que esa entidad fue creada mediante Decreto Ley Nº 11.901, documento que pese a las muchas reformas del sistema de Seguridad Social ha mantenido su status original. Pero, sensiblemente, con la complicidad de algunos comandantes la institución fue obligada a ingresar a la Capitalización Individual, dividiendo al grupo de rentistas en unos de Senasir y otros del SIP, algo por demás informal en Bolivia y que atenta contra las normas legales. Y es que ahora se conoce a dos grupos de jubilados, unos con mayores beneficios y otros sometidos al tope de rentas, con documento dispuesto para confirmar la discriminación, por el gobierno del señor Mesa y ratificado por el Dr. Rodríguez Veltzé.

Este hecho hizo que todos deberían tener un tope de renta, además éste se vuelve completamente segregacionista, unos con el cálculo realizado con la anterior a la Ley Nº 1.732 y otros con la aplicación de dicha ley, lo que dio como resultado diferencias bastante sentidas. Se olvidó por completo la verticalidad de su organización, porque dentro del sistema militar en cualquier estado se debe respetar esa verticalidad.

Estas anomalías por nadie han sido defendidas, en realidad correspondía representar el hecho a los comandantes de turno, pero muy sumisos obedecieron la orden presidencial, aunque la misma estaba en contra de los intereses de todos los activos y pasivos militares.

En la fecha se prepara solicitudes para ser presentadas al Presidente del Estado, por la UMSP, seguramente muy bien redactadas, con una serie de datos para pedir la eliminación del tope, especialmente a los grados mayores. Sin embargo sabemos perfectamente que no tendrá resultado favorable, por una razón elemental, los argumentos de las altas autoridades de gobierno siempre son negativos para cualquier modificación al tope. Pero no solamente este es el problema, sino que existen unas mentes obtusas, que aseguran que el Decreto Ley de creación de Cossmil está derogado, ignorando que sólo se extirpó el Régimen de Largo Plazo y se mantiene incólume el resto de los regímenes, lo que quiere decir que el Decreto Ley Nº 11.901 está en plena vigencia.

Según datos obtenidos, a la fecha se está preparando una nueva ley, con base en un estudio Matemático Actuarial del Régimen Especial, lo que quiere decir que sus propias autoridades coadyuvan con la idea del Gobierno en cuanto a que las entidades del seguro de salud deben constituirse en un solo servicio, quedando en este caso Cossmil reducido exclusivamente al Régimen Especial. Y es que los inteligentes no aceptan ninguna sugerencia para rescatar el origen de entidad integral o sea el origen de su creación, además que podrían presionar para que el Gobierno aplique la Constitución Política del Estado que dispone que las Fuerzas Armadas se rigen por sus propias leyes y reglamentos, mientras que, por el contrario, ahora hacen honor a “dejar hacer, dejar pasar’’ el vapuleo de esa noble entidad, aceptado por sus mismos directores, sin defensa, lo que a la larga recaerá en perjuicio de quienes hacen gala de saber todo.

Lo único cierto es que dentro de un tiempo, los comandantes, gerentes, etc., estarán en situaciones tal vez más inciertas que en la actualidad. El futuro de los miembros activos de las Fuerzas Armadas está en la balanza de las decisiones del Gobierno, sin que las autoridades respectivas pongan sus buenos oficios para retornar al sistema integral de prestaciones, especialmente cuando empiece a funcionar la Gestora pública. No debemos olvidar que en todos los países donde se aplicó la capitalización individual, sus Fuerzas Armadas han mantenido su autonomía, pero en el caso presente algunos señores aceptan cualquier cosa antes de defender a su ente de seguro social.

Si vamos por el camino errado, dentro de poco la Corporación del Seguro Social Militar se convertirá en una Dirección del Régimen Especial y otra de Vivienda, al margen de que es posible que pierda, por ejemplo, las concesiones mineras y otros bienes que sirvan para incrementar los ingresos para el Régimen de Salud.

Las disposiciones que emanan del Supremo Gobierno siempre están enmarcadas en forma genérica, por lo que es sumamente posible que los sistemas que todavía están en esa entidad, se ajusten a las normas originadas por el Estado. Esto se acrecienta con los estudios que se está realizando con base en un estudio Matemático Actuarial para un solo régimen, confirmando la liquidación de Cossmil, que de corporación nada tendrá. En consecuencia, no tiene sentido el término Corporación.