Comunarios no permiten construcción de botadero

Oruro, 22 (EL DIARIO).- Miles de comunarios rechazan la construcción de un nuevo botadero de basura en la zona de Cochiraya, porque “destruirá la fauna silvestre, la tierra y las aguas subterráneas que sirven para la agricultura y la ganadería en ese sector aledaño a la ciudad de Oruro”.

“Nosotros no estamos de acuerdo con el botadero de basura. Estamos defendiendo nuestro medioambiente, tal como dice la Constitución Política del Estado, estamos defendiendo lo que Dios nos ha regalado, la naturaleza y los animales silvestres”, afirmó el secretario general de la comunidad de Cochiraya, Wilfredo Quispe.

Cochiraya está ubicada al lado oeste de la ciudad de Oruro, en las cercanías de las dunas de arena y del río Desaguadero. A pocos metros se encuentra la ciudad, con miles de vecinos que también han advertido que no permitirán la construcción de un relleno sanitario aledaño.

Según Quispe, existe un claro ejemplo de la contaminación del medioambiente en Huajara, lugar donde actualmente está el botadero de basura, con la presencia de centenares de aves de rapiña, perros contaminados con enfermedades y gran cantidad de moscas que provocan malestar a los vecinos.

Los comunarios de Cochiraya pidieron a la alcaldesa municipal, Rossío Pimentel, una explicación técnica y científica para cuidar el medioambiente, pero no han logrado respuesta oportuna. Tampoco se cumple el artículo 33 de la Constitución Política del Estado, que obliga a todos a garantizar el derecho a un medio ambiente saludable, protegido y equilibrado.

Quispe dijo que si no se cumple la Constitución, “se está cometiendo un delito ambiental que debe ser sancionado por el Viceministerio de Medio Ambiente, incluso de oficio”.

El nivel freático se encuentra a 1,50 metros de profundidad y si los tractores quieren ingresar a ese lugar para depositar basura, se contaminará el agua subterránea y se promoverá el envenenamiento de ese líquido elemento que existe en la zona.

Según el director del Programa de Gestión de la Cuenca Poopó, Eduardo Ortiz, que se encargó de realizar un estudio del lugar, “el terreno es arcilloso y limo arcilloso, cubierto por una capa impermeable natural, que está frenando la filtración de las aguas acumuladas en la época de lluvia y, por eso, tarda en evaporarse”.