La falta de comunicación entre padres e hijos es uno de los principales factores que influye en el incremento de casos de embarazo de adolescentes, según datos del Observatorio de Adolescentes a cargo de Viviana Guamán.
En la ciudad de El Alto, la población juvenil ocupa el 70%, quienes en su mayoría dieron a conocer que tienen miedo en acudir a un centro de salud para obtener información de prevención ante las cuestionantes que les hacen a ellos antes de facilitarles los métodos anticonceptivos.
“El uso de los métodos anticonceptivos en cada una de las personas es una de las razones que ocasiona embarazos no deseados fuera de que no existe una adecuada relación de comunicación con sus padres de familia”, explicó Guamán.
Para la responsable de la unidad, se observa un aumento del porcentaje de adolescentes embarazadas las cuales tuvieron un 95% de incremento de embarazos en adolescentes, a ello se incluye también los casos de abortos que llegan a acudir las adolescentes.
“Las adolescentes, en muchos de los casos, ante los embarazos no deseados acuden a los abortos clandestinos con la finalidad de evitar enfrentar una nueva vida donde otro menor dependa de una adolescente, por ello se registran entre cuatro a cinco abortos pese al riesgo en salud que deban enfrentar”, explicó.
Guamán anunció políticas de prevención mediante la socialización del uso de métodos anticonceptivos, para quienes desde los 12 hasta los 18 años puedan tener conocimientos de su uso, además de poder abordar el tema con sus padres de familia de manera adecuada antes que puedan solicitar información equivocada por parte de sus amigos o el internet, factor que no es adecuado ante la posibilidad de que no todos los métodos anticonceptivos puedan favorecer a todas las personas.
CASOS
Entre los casos se incluye de Julia J. una menor de 16 años quien mantuvo oculto la relación sentimental que tenía con su enamorado del mismo establecimiento escolar y cuando él le propuso tener relaciones sexuales si bien ella se negó y prefirió no aceptarla, en una fiesta de curso, luego de consumir bebidas alcohólicas, ella cedió bajo las frases de cariño y promesas expresadas por su enamorado.
“Yo no le conté a mi mamá ni a nadie y cuando tenía que estar con el ciclo menstrual es cuando me asusté porque ese mes se suspendió y cuando le pedí a mi enamorado que acudiéramos a un centro de salud porque tenía miedo de estar embarazada, él simplemente me dijo que no iba a pasar nada que cuando una tiene por primera vez relaciones siempre se atrasa y al final pasó el tiempo hasta que me vi embarazada de tres meses, fue cuando él ya no quiso estar conmigo y se escapaba, hasta dejó el colegio”, recordó Julia.
Julia asumió la determinación de abortar por influencia de sus amigas, quienes desde su primera relación, le dieron a conocer que no era la única que se vio embarazada antes de terminar el colegio y que sólo necesitaba pedir permiso de su casa por un fin de semana para poder acudir a un lugar donde abortaría, pero para ello debía tener por lo menos cerca de Bs 2.500 dinero que tuvo que obtener vendiendo algunos objetos de valor de su propio domicilio.
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