La Cinemateca Boliviana fue escenario del primer miniciclo de tiflocine boliviano "Franchesco Díaz Mariscal”, dedicado a la población de invidentes, con el apoyo de la Fundación Estás Vivo.
El Tiflocine es un sistema de audiodescripción que compensa con la voz de un locutor, la falta de percepción de imágenes, mediante descripciones sonoras complementarias que detallan los gestos de los personajes, su apariencia, paisajes y otros.
Este novedoso proyecto fue acogido con beneplácido por las personas con discapacidad visual.