Llega delegación enviada a Arcopongo
El Ministerio Público se hizo presente con dos fiscales de Materia, Juan Linares y Ricardo Condori, quienes junto al forense, levantaron las pruebas necesarias para hacer la apertura del caso.
Luego de tres días de inspección a cuatro comunidades en Arcopongo, la comisión que partió el martes pasado, con autoridades de la Gobernación, un representante del Ministerio Público, el comandante de la UTOP y 58 efectivos policiales, dos Fiscales de Materia, un Médico Forense y representantes del Ministerio de Minería se llegó a confirmar el deceso de tres comunarios de Palma Flor, por perforación de bala y ocho detenidos. Sin embargo, no se dio a conocer si el tercer muerto correspondería a Gonzalo Cabrera.
Los pobladores que lograron salir del lugar, hasta la tarde de ayer, relataron que las autoridades llegaron por la tarde, momento en el que encontraron al primer muerto identificado como Antonio Flores, de 27 años de edad, que se encontraba en la comunidad de Siquimirani, que era acompañado por una muchedumbre.
En el mismo lugar, también se vio la presencia del hijo de Telmo Cahuana, hombre fuerte de la cooperativa Ullakaya Condorini, Edson Cahuana, quien se encontraba detenido con una metralleta colgada al cuello, acusado presuntamente por el asesinato de tres cooperativistas.
Por su parte, desde la Gobernación informaron que ya en la comunidad Maracelani encontraron el cuerpo de dos personas, una identificada como Mario Villegas de 10 años y el otro que aún no fue reconocido, sin embargo, no se aclaró si se trataría del cuerpo de Gonzalo Cabrera reclamado en la Sede de Gobierno y que no estaría dentro de los informes de los dirigentes, por tratarse de un cooperativista de Ullakaya, o si se trataría de un cuarto deceso.
Según el informe de la Gobernación, Cahuana el detenido que acompañó a la comisión para ayudar en las investigaciones, reconoció el cadáver como uno de los matones que ingresó a la región para atacar a los cumunarios. Las tres muertes fueron confirmadas por el médico forense del IDIF, Efraín Mariscal.
Según la información brindada por la comisión investigadora, que se trasladó hasta los lugares en conflicto, en la zona se pudo evidenciar la presencia de casquillos de bala de ametralladora, que aún se desconoce si pertenecerían a un máuser o a una fal, pero que serían de calibre 7,62.
La Policía habría arribado al lugar a cargo de dos comandantes, el coronel Javier Ayala, del Comando de la Policía Rural y Fronteriza, y el coronel Gonzalo Portugal, comandante de la Unidad Técnica de Operativos Policiales (UTOP), llegando a un número de 58 efectivos policiales.
De la misma forma, el Ministerio Público se hizo presente con dos fiscales de Materia, Juan Linares y Ricardo Condori, quienes junto al forense, levantaron las pruebas necesarias para hacer la apertura del caso que ahora se encuentra en manos de dicha entidad.
Asimismo, desde la Gobernación manifestaron que mientras la comisión se encontraba en Marancelani, pobladores de Arcopongo señalaron que a esta población habrían llegado ocho personas armadas de la cooperativa Ullakaya, que estarían en la casa del padre del Alcalde de Inquisivi y que antes de la llegada de la comisión huyeron.
Sin embargo, una cuadrilla logró alcanzarlos y detenerlos, estas ocho personas armadas fueron identificadas como miembros de la cooperativa Ullakaya.
Las autoridades locales manifestaron que el caso debe ser investigado, porque se han perdido vidas humanas y se debe encontrar quienes son los autores directos como intelectuales, por lo que el caso ya se encuentra en manos de la justicia, proceso que no excluiría a las diputadas y autoridades implicadas en el caso.
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