Expertos internacionales
“Los países deben optar el uso de energías alternativas: la eólica y la eléctrica, frente al uso de combustibles fósiles para el transporte masivo, podrán reducir la contaminación atmosférica y tratar de reducir el cambio climático”.
En el seminario internacional preliminar sobre Cambio Climático con miras al G77+China que se realizó en la ciudad de Santa Cruz, unos de los expertos del Brasil, Ricardo Abramovay, máster en Ciencias Políticas y doctor en Sociología, asegura que el cambio climático afectará gravemente al planeta si no se toman medidas urgentes de mitigación del efecto invernadero.
El brasileño admitió que pasamos más allá de las fronteras ecosistémicas, lo que genera que la vida en el planeta se encuentra bajo amenaza. El reto es que al mismo tiempo que tenemos que recuperar los servicios ecosistémicos, debemos luchar contra la pobreza.
Abramovay es profesor titular en el Departamento de Economía de la prestigiosa Universidad de São Paulo (USP) y asistió al seminario Economía y Sociedad Para Vivir Bien, y expuso junto al expresidente de Brasil, Inacio Lula.
“Tienen algo muy importante a transmitir, que es que el crecimiento económico no puede ser una finalidad, sino el medio para llegar a finalidades sociales”, sostuvo.
Abramovay es del mismo criterio que Eduard Muller, experto costarricense, que también participará del encuentro internacional y que dijo que el Cambio Climático amenaza el futuro de la vida, que en caso de Brasil ha afectado con intensas sequías los reservorios de agua sobre todo en el Estado de Sao Paulo de Brasil.
Muller, quien llegó a Santa Cruz, destacó el respeto a la Madre Tierra en diferentes países, pero que el mismo debe ser aprovechado para cuidar nuestro medioambiente, ya que la naturaleza está siendo destruida por el ser humano.
Agregó a los medios de comunicación que el planeta necesita líderes que propongan una modificación sobre el uso y protección de recursos naturales. “Estoy totalmente convencido que Bolivia podría liderizar, porque tiene un planteamiento que no había visto en ninguna parte”, afirmó el activista Muller.
Considera que los países deben optar el uso de energías alternativas: la eólica y la eléctrica, frente al uso de combustibles fósiles (gasolina, diésel) para el transporte masivo, podrán reducir la contaminación atmosférica y tratar de reducir el cambio climático.
El encuentro en la ciudad cruceña, con la presencia de expertos internacionales, además de representantes de la República China y Bolivia, analizan y propondrán acciones que serán presentadas para su consideración en la Cumbre del G77.
ENERGÍA LIMPIA
Abramovay sugiere que el futuro del mundo es la producción de la energía limpia, al anunciar que en los últimos 15 años la revolución digital y la revolución en las tecnologías de renovables avanza a tal velocidad y que en 20 lugares del mundo “existe la producción de energía solar, siendo la más barata de todo las fuentes de energías”, dijo durante las disertaciones en Santa Cruz.
Agregó que actualmente se debate no la fuente de energías, sino el modelo de energía limpia y además democratizada.
El brasileño es experto sobre el Cambio Climático Global, retos y oportunidades que se realiza en la ciudad oriental hasta este viernes, cuando se realice el listado de planteamientos que serán presentados a la Cumbre del G77, con la intención de frenar la crisis climática.
DEJAR DE SUBVENCIONAR AL PETRÓLEO
Abramovay, también se refirió a que los países deben dejar de subvencionar al petróleo e invertir en energías renovables ante la marcada preocupación por el calentamiento global.
“Una medida importante es interrumpir las subvenciones al petróleo, el mundo gasta con subvenciones al petróleo algunas veces más de lo que se invierte en energías renovables evitando un daño sustancial a la naturaleza, que nos e prevé”, apuntó.
Además considera que es insostenible el modelo energético basado en los combustibles fósiles y pide a los gobiernos encaminar su presupuesto para la implementación de la energía solar, eólica y biomasa.
“Energía hasta hoy en todo el mundo fue sinónimo de centralización y de poder. Energía en el siglo XXI será cada vez más sinónimo de distribución y utilización racional de recursos” advierte.
En su exposición, afirmó que las energías limpias deben pasar a ser el motor del progreso y advirtió que de continuar subvencionando a los combustibles fósiles, muchos gobiernos importadores enfrentarán nuevas crisis por la distorsión del precio del petróleo en el mercado internacional.
Sugirió la responsabilidad compartida y por democratizar la distribución de la energía en el mundo. Al revelar que la gran parte de la subvención al petróleo no benefician a los pobres sino a aumentar el consumo de los que cuentan con más ingresos económicos.
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