Muerte de policías en Sacaca quedó en impunidad

Johnny Castelú, abogado de los familiares de los cuatro policías victimados en la localidad de Sacaca, Norte Potosí en mayo de 2010, advirtió que se corre el riesgo de que el proceso quede en la impunidad a cuatro años de ocurrido el hecho.

“Estamos solicitando que se cumplan con los mandamientos de aprehensión en contra de ocho personas que fueron identificadas, pero que no pueden ser capturados porque no se puede entrar a las provincias del Norte de Potosí, por las amenazas de los comunarios de ese sector”, dijo.

El 24 de mayo de 2010 el suboficial Nelson Alcócer Casano, los cabos Esteban Alave Arias y Rubén Cruz Aruquipa, además del policía Miguel Ramos Palluni, pertenecientes la Dirección de Prevención Contra el Robo de Vehículos (Diprove) de Challapata, Oruro fueron ajusticiados, se presume, por una turba de comunarios que los confundieron como con “falsos policías”.

Castelú, a nombre de los familiares de los cuatro uniformados, demandó que de una vez por todas se ejecuten los mandamientos contra las nueve personas identificadas como los gestores del hecho de sangre que cobró la vida de los policías.

“Esperamos que los responsables vayan a un juicio como corresponde en Ley y derecho”, afirmó.

En esa época era comandante de la Policía Boliviana, el general Óscar Nina quien fue fustigado acremente por los familiares y camaradas de los fallecidos el instante en que los cuerpos eran velados en dependencias policiales de la ciudad de Oruro, por considerar que no se actuó debidamente para rescatarlos con vida.