FFAA instruye nuevo arresto contra suboficial

En una acción, calificada de “ilegal y abusiva” por los representantes del Defensor del Pueblo, cerca de las 19.50 horas de ayer, en puertas del Estado Mayor, efectivos de la Policía Militar (PM) procedieron a una nueva privación de libertad contra el suboficial Johnny Gil Leniz, representante nacional de suboficiales y sargentos, por haber liderado las movilizaciones en el mes de abril en demanda de eliminar la discriminación al interior de las Fuerzas Armadas (FFAA).

Cerca de las 18.00 horas, representantes legales, del Defensor del Pueblo y la esposa del suboficial Amelia Mendoza, se apersonaron al Gran Cuartel de Miraflores informados de que el Tribual Permanente de Justicia Militar, presidido por el general Eduardo Fernández, habría emitido una resolución que notificada al Comandante del Ejército, Omar Salinas, y la Juez Sumariante, coronel Marcelo Orellana, para que se dé cumplimiento a la Acción de Libertad, dictada el domingo 1 de junio, por el Juzgado Sexto de Materia en lo Penal.

La orden judicial había sido incumplida tanto por Salinas como Orellana, “de manera flagrante, durante seis días”, según Oswaldo Rojas, abogado del suboficial Gil.

Por tal razón, Rojas había presentado un incidente ante el Tribunal Permanente de Justicia Militar que ocasionó se emita esta resolución para que la orden judicial sea cumplida tal cual establece la Constitución Política del Estado (CPE), que está sobre cualquier otra norma, aún sobre la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas (LOFA).

Tal medida estaba siendo ejecutada ayer en el Estado Mayor, cuando Gil en la puerta del recinto militar lo esperaba su esposa y los representantes del Defensor del Pueblo.

Sin embargo, en una acción calificada de violenta comandada por el responsable de la PM, un oficial de apellido Torrejón, “lo rodearon y comenzaron los jalones con un memorándum para hacerle firmar”, relató un familiar.

Tanto los abogados de Gil y del Defensor del Pueblo trataron de mediar en esta acción y fueron echados a un lado. Instante en que se vivieron momentos tensos provocando que la esposa, Amelia Mendoza, sufra una crisis nerviosa y sufra convulsiones.

EL DIARIO estuvo presente el instante en que el oficial a cargo no permitió que los efectivos de la PM dejen que Gil auxilie a su esposa que se encontraba tendida en el piso y atendida solo por amistades, que luego la tuvieron que llevarla hasta Cossmil.

“Esto va a seguir así, si sus abogados no entienden. Yo simplemente procedo de acuerdo a las normativas (de las FFAA) y nuestros procedimientos y si sus abogados no reconocen nuestra normativa van a seguir en lo mismo”, declaró a EL DIARIO el juez Orellana, quien ordenó la nueva privación de libertad, bajo los cargos de sedición e instigación a delinquir.

Luego se constató en la Unidad de Emergencias de Cossmil que la señora Mendoza era atendida debidamente y lograron estabilizarla. El personal médico que tuvo contacto con este medio comentaba que la paciente preguntaba insistentemente por su esposo y sus tres hijos a los cuales había dejado solos en su casa.