Washington.- La mayoría de los niños procedentes de Centroamérica que cruzaron solos de forma ilegal a Estados Unidos tienen padres indocumentados en el país, según las conclusiones del presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes de EEUU, el republicano Bob Goodlatte, tras viajar a la frontera.
Goodlatte encabezó una delegación bipartidista de congresistas a la zona del valle de Río Grande, fronteriza con México, organizada para recabar información sobre el flujo de niños, adolescentes y familias que siguen entrando ilegalmente al país y que ha provocado lo que el Gobierno califica ya como una “crisis humanitaria”, informó Efe.
Según las conclusiones difundidas ayer por la oficina del congresista, para la “gran mayoría” de los niños centroamericanos que cruzaron sin compañía de un adulto se ha tenido contacto con sus padres, “que ya estaban en Estados Unidos ilegalmente” y que participaron de una u otra forma en la operación para su traslado ilegal.
Los congresistas que visitaron instalaciones federales, se reunieron con funcionarios del Departamento de Salud, con miembros de la Patrulla Fronteriza en McAllen (Texas) y del puente internacional de Brownsville.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza abogaron por medidas disuasorias para detener esta afluencia, según la oficina de Goodlatte, y denunciaron que se ha extendido la voz en América Latina de que las mujeres y los niños no son considerados “prioritarios” para las deportaciones.