Tras la secularización o la supresión de las misiones franciscanas en la región de Guarayos en 1939, el Estado boliviano, en ese entonces a la cabeza del coronel Germán Bush, buscó por cuenta propia completar el proceso de “incorporación” del pueblo Guarayo a la sociedad civil; sin embargo, para Pilar García Jordán, autora de “Para una crónica de Guarayos”, desde una perspectiva del misionero franciscano, mediante una serie de escritos consultados y transcritos fielmente, el impacto de este proceso es otro.
La llegada de los funcionarios, de los colonos, de la Reforma Agraria, el control político de Movimiento Nacionalista Revolucionarios (MNR), el establecimiento de las relaciones de dominación de los carai (blanco -mestizos) y los intentos de los guarayos por defender sus tierras, evidencian que la secularización no produjo los frutos esperados por el Estado boliviano.
“Corrupción de los funcionarios, drástica disminución demográfica de los pueblos guarayos acompañan los “progresos” proclamados, y los indígenas pasan de la tutela de los padres a la de los propietarios blancos y el control político ejercido sobre ellos por el Estado”, señala García Jordán.
Es así que para la autora, el Estado boliviano había “teóricamente” completado el proceso de incorporación de los guarayos a la nacionalidad, pues estos gozaban de los “derechos civiles” y “políticos”; sin embargo, en la práctica histórica, revela ser una falacia ante la imposición de unas relaciones de dominación económicas establecidas por los carai y el control político ejercido por éstos a través del en ese entonces, “omnipotente” MNR.
“El Estado, el Gobierno boliviano, no controló la aplicación efectiva de las leyes, no creó instituciones que se encargaran de mediar eficazmente y posibilitaran la ‘plena incorporación’ de los guarayos a la ciudadanía civil y política”, reflexiona García Jordán.
Finalmente, la lectura de los diarios permite ver que los franciscanos percibieron con desilusión, tristeza e indignación, que los blanco-mestizos destruían lo que ellos habían conseguido con mucho esfuerzo. “Como expresó amargamente el párroco de Yaguarú, en junio de 1945, constatando los atropellos infringidos por los carai sobre los guarayos ‘Destino indio: ser esclavo de la raza dominante’”, menciona García Jordán.
Pilar García Jordán es catedrática de Historia de América en la Universidad de Barcelona, directora del Taller de Estudios e Investigaciones Andino Amazónicas (Barcelona). Además es profesora en varias universidades latinoamericanas y europeas entre sus líneas de investigación está el papel de las misiones católicas como instrumento de nacionalización de territorios y poblaciones indígenas.
El libro “Para una crónica de Guarayos” es una investigación publicada en mayo de este año por el Instituto Latinoamericano de Misionología de la Universidad Católica Boliviana que aporta con investigaciones sobre la realidad histórica y sociocultural de los pueblos bolivianos y forma parte de la colección Scripta Autochtona (Ilamis). ANF
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