Sismo de 4.5 grados se sintió en tres municipios cruceños

Un sismo de 4.5 grados en la escala de Richter se sintió en la madrugada de ayer en tres municipios del departamento cruceño. El hecho que afortunadamente no produjo daños personales, solamente ocasionó algunas rajaduras en las paredes de varias viviendas.

Enrique Bruno, director del centro de Operaciones de Emergencia Departamental (Coed) de la Gobernación, señaló que este sería el segundo movimiento sísmico que se produce en la provincia Sara, donde el primero ocurrió el pasado 14 de julio y tuvo una escala de 3.8 grados en la escala de Richter.

Aunque este último se sintió con mayor intensidad en el epicentro de Portachuelo, afectando a las comunidades de San Joaquín, Los Cedros y la estancia Guenda Colorado, Montero y Warnes, también sintieron los movimientos sísmicos, solo que en menor magnitud.

Hasta el lugar de los hechos ya se trasladaron tres brigadas del grupo de rescate de la Gobernación para realizar una evaluación a fondo y darles tranquilidad a los lugareños que no están acostumbrados a este tipo de fenómenos, además, dicho personal también brindará capacitación adecuada sobre qué acciones tomar en este tipo de circunstancias.

Asimismo, la autoridad explicó que el sismo fue ocasionado por una falla geológica llamada Mandeyapecua, la cual está siendo estudiada para trazar las líneas específicas que determinen sus causas. Para ello, ya se han enviado a tres técnicos hasta el Observatorio de San Calixto en La Paz con el objetivo de que sean instruidos por el periodo de un mes para que en base a ello se emitan evaluaciones más certeras sobre la falla geológica que sería la misma que se presentó en la provincia de Cordillera el pasado mes.

“Hasta el momento no hay de que alarmarse, según el Observatorio de San Calixto los movimientos que se sienten con este tipo de magnitudes no tienen consecuencias. Sin embargo, tenemos la preocupación y por eso tenemos al personal adecuado capacitándose en San Calixto para poder dar información certera y tener en claro el comportamiento de la fatalidad”, concluyó Bruno.