La comunidad alemana se reunió en pleno en la residencia del embajador Peter Linder para vivir el partido final de la Copa Mundial disputada entre la selección de su país y de la República Argentina.
Tras 90 minutos de nervios, en el tiempo complementario la comunidad alemana estalló en júbilo cuando fue derribado el arco argentino, dando paso a que obtenga la Copa Mundial 2014 la representacion alemana. Con la calidez que los caracteriza, el embajador Linder y su esposa Abeba Bekele Mamo hicieron que los invitados disfruten de un momento muy agradable.
La jornada futbolera se complementó con un buffet típico germano, acompañado por la tradicional cerveza alemana, que sirvió para brindar por la copa, en una tarde coronada por la emotividad. El festejo se prolongó por varias horas.